Trump quiere permitir la explotación de un bosque protegido en Alaska
Si se lleva a cabo, esta decisión llevará a la desprotección de más de la mitad del bosque
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump[contexto id=»381723″], quiere revertir las restricciones a la explotación forestal, minera y energética del bosque nacional Tongass, el mayor bosque húmedo del mundo.
El mandatario ha ordenado a su secretario de Agricultura, Sonny Perdue, que decrete una exención en ese territorio tras discutir el asunto con el gobernador de Alaska, el republicano Mike Dunleavy.
La senadora republicana por Alaska, Lisa Murkowski, también ha pedido a Trump que se deshaga de estas restricciones. “La industria maderera ha disminuido de forma precipitada y es sorprendente que las pocas empresas papeleras que quedan en el bosque nacional más grande de nuestra nación tengan que preocuparse constantemente por quedarse sin suministros”, ha dicho en un comunicado. Además, considera que la protección del bosque está “perjudicando” la capacidad de Alaska “de desarrollar una economía sostenible durante todo el año para la región sudeste”.
Si se lleva a cabo, esta decisión llevará a la desprotección de más de la mitad del bosque, más de seis millones de hectáreas, al permitir su explotación económica, así como la construcción de carreteras.
Las restricciones fueron decretadas por el expresidente Bill Clinton y más tarde George Bush trató de revertir sin éxito.
El Tongass abarca una gran proporción del sureste de Alaska fronteriza con Canadá con bosques de abetos, tsugas y cedros, así como ríos con salmones e imponentes fiordos. Los expertos defienden que este territorio protegido es vital para algunas especies como el oso pardo, el ciervo de cola negra de Sitka y el azor común.
