Toni Cantó (Valencia, 1965) empezó trabajando en un chiringuito. Bueno, no era propiamente un chiringuito. Era una especie de carpa o mercadillo que montó con sus amigos, durante uno de esos veranos eternos de la juventud. Luego estuvo sirviendo copas en la noche valenciana. Desembarcó en Madrid para ser modelo, pero acabó siendo unas cuantas cosas más: actor, presentador de televisión y político. En definitiva, hablamos de más de 40 años de exposición pública.