Podemos ya ha renunciado a Madrid. La elección de entregar las candidaturas de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento a dos perfiles poco conocidos, según todas las fuentes consultadas, lo demuestra. «Nadie quiere» dar el paso, revelan a THE OBJECTIVE para referirse a la negativa de las primeras espadas de jugarse el tipo en una plaza muy complicada. Pero la sorpresa que Podemos guarda en la chistera consiste en intentar sacar provecho de esa fragilidad para golpear a Yolanda Díaz y al sector errejonista.