Escasez de sémola en Argelia, tomates al doble de su precio en Marruecos, racionamiento de harina en Túnez y una inasumible carestía en Libia empobrecen aún más a las familias del Magreb que afrontan un costoso ramadán, mes sagrado de ayuno y de gran consumo, por la guerra en Ucrania.
Fuente: EuropaPress