Koldo García tenía un plan para seguir recibiendo mordidas tras abandonar el Ministerio de Transportes. La estrategia incluía a Santos Cerdán. Pero había un problema: hacía un año y cuatro meses que no le cogía el teléfono ni se veían. El asesor pidió a José Luis Ábalos que le ayudara a verse «cinco minutos» con el ex secretario de Organización del PSOE para que este usara su influencia sobre el nuevo ministro, Óscar Puente. La intención era que le ayudaran a conseguir dos adjudicaciones de obra pública a las que sacar «rédito económico personal». La conversación está incluida en el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que revela un preciso engranaje que facilitaba contratos públicos a empresas a cambio de contrapartidas.
El asesor ministerial relató a Ábalos su intención de delatar a Cerdán ante Pedro Sánchez si no le recibía: «Le he escrito a Santos. Le he dicho que voy a ver a José cinco minutos. Necesito que me veas cinco minutos. O me ves cinco minutos la semana que viene o te juro por Dios que le llevo a Pedro una grabación que está hecha en Pamplona. Porque Santos ha ido al Ministerio de Transportes a colocar a un par de personas de Justo, de Acciona». Se trata de la empresa de la que el exministro y su asesor habrían cobrado mordidas superiores a los 550.000 euros.