Villarejo se sienta en el banquillo: ataca al CNI y Corinna afirma que se sintió aterrorizada

El excomisario José Manuel Villarejo, implicado en una cadena de casos en los que acumulada delitos que van desde el tráfico de influencias a la extorsión, ha comparecido este viernes en el juzgado de lo Penal número 8 de Madrid. En el juicio han participado algunas de las figuras vinculadas a la intrincada trama del expolicía, como Corinna Larsen.

Lo más importante: Villarejo se ha sentado en el banquillo tras más de tres años en prisión. En este primer juicio, afrontaba delitos de calumnias y denuncias falsas al exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán. Tras escuchar a las partes, la Fiscalía ha decidido retirar su acusación contra el antiguo policía por el delito de calumnias y ha mantenido el de denuncia falsa. Esto se traduce en una rebaja en la petición de condena, de dos a un año.

Villarejo ha declarado que el CNI le pidió que se reuniese con Corinna Larsen en Londres y puso los medios para grabar el encuentro, en el que la empresaria le reconoció que estaba «aterrada» y amenazada de muerte por su relación con el rey emérito.

Por su parte, Corinna Larsen, que ha declarado por videoconferencia desde Londres, ha confirmado que tuvo la sensación de ser amenazada por el jefe de Estado y por los servicios secretos. Además, ha asegurado que las amenazas también se dirigieron contra su hijo. La empresaria ha acusado al CNI de pretender poner cámaras en su apartamento de Mónaco y también ha sido muy crítica con Juan Carlos I.

Villarejo ha sostenido que hubo una operación «perfectamente pergeñada» para eliminarle por haber denunciado a sus superiores irregularidades en «una serie de movimientos de cuentas» donde se «mezclaban comisiones con fondos reservados». Se ha calificado como «la persona más vilipendiada del país». Después ha pasado al ataque y ha llegado a decir que una fuente «muy importante», que no ha revelado, avisó del atentado que iba a ocurrir en Las Ramblas, pero el CNI la desestimó por poco fiable.

A continuación ha declarado, en calidad de testigo de la acusación, Félix Sanz Roldán, exdirector del CNI. Roldán ha negado las acusaciones de Corinna y no ha respondido a algunas de las preguntas del juez alegando secreto profesional. También ha afirmado no tener ninguna relación con el excomisario, a pesar de que se ha mostrado una foto en la que ambos bajan juntos de un avión. «Yo nunca supe en absoluto que tenía relación alguna con el CNI y sus actividades», ha insistido.

Por otra parte, José Luis Olivera, exdirector de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), ha reconocido que viajó a Melilla junto a Villarejo en una operación antiterrorista. Este movimiento, ha afirmado, fue autorizado por altas instancias.

Finalmente, Villarejo ha hecho uso de la palabra en el último turno y ha protestado por la destrucción de sus archivos, sugiriendo que entre ellos se incluyen secretos del 23F y el 11M.