El 'caso Negreira' podría archivarse
Un error procesal podría acabar con el caso sin ni tan siquiera hayan tenido que prestar declaración los expresidentes
El exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) José María Enríquez Negreira.
El caso Negreira, el más convulso de la historia reciente del fútbol español, podría dar un vuelco inesperado justo en el momento que se cumplen dos años del inicio de su investigación judicial. El pasado mes de febrero, la juez que instruye el caso alargó seis meses más la investigación con la intención de ordenar nueva diligencias.
La magistrada acordó la prórroga, tal y como habían pedido tanto la Fiscalía como la acusación ejercida por LaLiga, al entender que el procedimiento puede «dilatarse» porque no han sido practicadas las declaraciones de los investigados. Estas diligencias son obligatorias antes de enviar el caso a juicio.
Pero, atención, en la fase de instrucción en la que nos encontramos, las prórrogas deben acordarse dentro del plazo establecido, de cada seis meses. Fuentes jurídicas aseguran a THE OBJECTIVE que el auto de prórroga dictada por la magistrada se notificó pasado el plazo a los abogados, algo que podría haber motivado la suspensión de las declaraciones previstas para el próximo mes de junio.
La prórroga se tenía que haber dictado y comunicado a las partes antes del 1 de marzo de 2025, y lo que ocurrió es que la juez hizo una resolución con fecha de 26 de febrero, pero no se notificó a las partes, las defensas de los investigados, hasta el 13 de marzo. Al haber caducado la prórroga del 1 de marzo, la ampliación del plazo para seguir adelante con la instrucción ya no está vigente. Los abogados del FC Barcelona consideran que la comunicación realizada el 13 de marzo es inválida desde el punto de vista procesal, ya que -entienden- que se efectuó, una vez el plazo ya había expirado.
Los letrados del club azulgrana consideran que la jurisprudencia es muy clara en este sentido. La Sentencia 48/22 de la sala segunda del Tribunal Supremo, de 20 de enero, aclara respecto del plazo de instrucción previsto en el artículo 324 LECRim que «de acordarse diligencias de forma extemporánea ello conlleva indefensión material del investigado, no solo indefensión formal».
Por estas razones, abogados como el del exdirectivo azulgrana Albert Soler han solicitado que se anule la prórroga, petición a la que se ha adherido también el FC Barcelona. La anulación sería el paso previo a archivar el procedimiento por caducidad de la instrucción.
Las declaraciones de la esposa de Enríquez Negreira, Ana María Rufas, su hijo Javier Enríquez Romero y los directivos del FC Barcelona Sandro Rosell, Josep Maria Bartomeu, Albert Soler y Óscar Grau estaban programadas para el próximo mes de junio pero la titular del juzgado de instrucción número 13 de Barcelona, Alejandra Gil, que investiga el caso Negreira, ha decidido suspenderlas sin ser aplazadas a ninguna fecha.
Se trata de un nuevo freno a la instrucción de este caso que investiga los supuestos pagos millonarios del Barça al exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA) José María Enríquez Negreira. Fuentes jurídicas señalan que, si no prospera el recurso en el que se solicita el archivo de la causa, no será hasta después del verano cuando la instructora cite de nuevo a los investigados y testigos involucrados en la causa.
Recordemos que el principal investigado en la causa, José María Enríquez Negreira, acudió a la citación judicial el año pasado pero se negó a declarar ante la juez. El exárbitro ha aportado informes médicos en los tribunales de que padece una enfermedad degenerativa.
El magistrado Joaquín Aguirre, que investigó el caso hasta su jubilación el pasado mes de enero, acordó en junio del año pasado citar a declarar al resto de imputados, pero abandonó el juzgado sin fijar fecha para los interrogatorios. La magistrada Alejandra Gil, que desde el mes pasado sucede a Joaquín Aguirre, recogió el testigo y fijó la convocatoria de las declaraciones que finalmente ahora han quedado suspendidas.
La investigación se centra ahora en rastrear el dinero que el Barcelona habría pagado al exvicepresidente del Comité Técnico Arbitral (CTA). La juez indaga en los cerca de siete millones de euros entre 2001 y 2018 que Enríquez Negreira y su hijo recibieron del Barcelona y si estos pudieron obedecer a una retribución «ilegítima» a árbitros de fútbol.
El tribunal trata de probar si hubo una posible corrupción «sistémica» en el seno del CTA cuando Negreira pertenecía a la cúpula este organismo. La Guardia Civil no ha podido concluir que quede acreditado que estos pagos tuvieran como finalidad «unos supuestos asesoramientos en materia arbitral».
Los agentes del Instituto Armado también notificaron en su último informe que habían descubierto tres millones de euros en las cuentas de la mujer de Negreira, motivo por el que ha acabado imputada por blanqueo. Estas cuentas, que datan desde 1992, están en proceso de estudio y análisis en aras a determinar el origen. Fuentes del caso aseguran que no se corresponden a los pagos que presuntamente habría cobrado Negreira.
El caso comenzó a raíz de una denuncia de la Fiscalía por los delitos de corrupción entre particulares en el ámbito deportivo, administración desleal y falsedad en documento mercantil. Pero ahora, el caso podría quedar archivado por un error procesal sin ni tan siquiera hayan tenido que prestar declaración los expresidentes del FC Barcelona, Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu.
