Abe niega su implicación y la de su esposa en un caso de corrupción
El primer ministro nipón, Shinzo Abe, ha negado este miércoles su implicación y la de su esposa, Akie, en un caso de corrupción sobre la venta en 2016, a una décima parte de su valor, de un terreno público, lo que ha propiciado una ola de peticiones de dimisión entre la ciudadanía y la oposición.
El primer ministro nipón, Shinzo Abe, ha negado este miércoles su implicación y la de su esposa, Shinzo Akie, en un caso de corrupción sobre la venta en 2016, a una décima parte de su valor, de un terreno público, lo que ha propiciado una ola de peticiones de dimisión entre la ciudadanía y la oposición.
«Ni mi esposa, ni yo, ni ningún miembro de mi Gabinete estuvimos involucrados en la venta», ha dicho hoy Abe en una sesión parlamentaria, preguntado por el supuesto trato de favor recibido por la polémica institución ultraconservadora Moritomo Gakuen a la hora de adquirir un terreno estatal con el objetivo de construir en él una guardería, de la que Akie iba a ser presidenta honoraria.
Pese a la reticencia del primer ministro a admitir responsabilidades, el escándalo ha movido a cientos de personas a congregarse diariamente frente a su residencia oficial pidiendo su dimisión. Hay convocadas manifestaciones hasta el viernes.
Durante su intervención este miércoles, Abe también ha negado estar involucrado en la manipulación de unos documentos del Ministerio de Finanzas relacionados con el caso, que se cree que fueron alterados para encubrir la trama y cuyo falseo fue reconocido este lunes por Taro Aso, titular del ministerio y vice primer ministro japonés. De acuerdo a una investigación interna del Ministerio de Finanzas, entre los datos que se eliminaron constaban el nombre de la esposa de Abe, Akie, y su apoyo al proyecto, además de otras referencias que señalaban la vinculación del primer ministro y el ministro de Finanzas con el responsable de la guardería.
Cabe recordar que Abe prometió en su momento que dimitirá como primer ministro y como diputado si se demuestra su complicidad o la de su esposa en los supuestos favores de las autoridades a la institución educativa, informa EFE.