Al menos diez personas, incluido un policía, han muerto en el tiroteo ocurrido en un supermercado de Boulder (Colorado, Estados Unidos), según han informado las autoridades.
Lo más importante: el atacante, que ha resultado herido en el enfrentamiento con la Policía, ha sido detenido. En las imágenes emitidas por televisión se veía a dos policías escoltando a un detenido esposado y con la pierna ensangrentada, aunque podía andar por sus propios medios. Por el momento, las autoridades no han dado más detalles sobre el detenido ni los motivos para cometer el crimen.
«Sabemos de 10 muertes en la escena, incluido uno de nuestros agentes», ha informado en rueda de prensa la jefe de la Policía de Boulder, Maris Herold. El agente fallecido, identificado como Eric Talley, de 51 años, fue uno de los primeros en llegar al lugar del tiroteo, un supermercado King Soopers, pasadas las 14:30 hora local.
Por su parte, el fiscal del distrito del condado de Boulder, Michael Dougherty ha prometido «que se va a hacer justicia» y se ha comprometido a ser «muy cuidadoso» con la escena del crimen durante la investigación.
También ha participado en la rueda de prensa el fiscal federal para el distrito de Colorado, Matthew Kirsch, que detalló la implicación de las autoridades federales en la investigación.
Ninguno de los participantes en la comparecencia, que no han aceptado preguntas, ha querido especular con los posibles motivos del ataque, ni tampoco establecieron relación alguna entre el atacante y el supermercado.
Tras más de un año sin grandes tiroteos en Estados Unidos, el de Boulder es el segundo en apenas seis días tras los ataques a locales de masajes asiáticos de la semana pasada en Atlanta, que dejaron ocho muertos. El de Boulder ha dejado diez y se ha convertido en el mayor tiroteo masivo en el país desde agosto de 2019, cuando un hombre armado mató a 23 personas en un Walmart en El Paso (Texas).