Los abuelos cántabros que arrasan en TikTok: bailes como terapia
La cuenta del centro de día Luz de Luna acumula cerca de 34.000 seguidores y 1,2 millones de me gustas
La cuenta del centro de día Luz de Luna acumula cerca de 34.000 seguidores y 1,2 millones de me gustas
Con sus bailes y canciones, los «abuelos» -tal y como les llaman cariñosamente sus cuidadoras- de un centro de día de Santander acumulan miles de reproducciones y «me gustas» en TikTok, que además les sirve como terapia para mantenerse «activos» y de buen humor.
Vicenta, Aurora, José Luis o Piluca son algunos de los protagonistas de la cuenta del centro de día Luz de Luna, del barrio santanderino de Peñacastillo, que acumula cerca de 34.000 seguidores y 1,2 millones de me gustas en esta popular red social. «Lo hacemos para disfrutar con los abuelos y que estén entretenidos», explican a EFE Alba Haro e Irantzu López, dos de las enfermeras del centro de día, que tuvieron la idea de grabarse bailando junto a los usuarios para subir los vídeos a TikTok.
Durante una excursión el pasado agosto, señalan, se les ocurrió «grabar un vídeo y subirlo a TikTok a ver qué le parecía a la gente» y en poco tiempo empezaron «a tener visitas, visitas y más visitas». Fruto de esa popularidad, Alba e Irantzu incorporaron los bailes y los «trends» de esta red social como «una actividad más del centro». «Nos grabamos, nos lo pasamos estupendamente y damos también alegría a la gente que nos está viendo», dicen.
El objetivo del centro, al que acuden diariamente estos usuarios, es que las personas mayores se mantengan activas y se relacionen entre ellas, algo que según afirman las enfermeras, se logra con estos bailes, ya que «tienen que aprenderse los pasos» y bailar les «motiva».
«Nos dicen ¿hoy bailamos, no? ¿Qué vamos a hacer hoy?, quiero bailar», cuentan estas dos enfermeras, quienes consideran, además, que haberse vuelto «virales» en TikTok sirve como un «una motivación extra para ellos».
«Les gusta que les vean, que su familia en casa les diga que les han visto», indican, aunque insisten en que no suben los vídeos «para que sean virales». «Los subimos por diversión, para que estén activos, tanto mentalmente como físicamente», apuntan.
Encantados con el baile
Acompañados de Alba e Irantzu, los usuarios del centro cuentan que están «encantados» con esta actividad y «muy contentos» de que sus familiares o gente por la calle les digan que han visto sus vídeos. «Es lo mejor que me ha pasado en mi vida, me lo paso muy bien», asegura Aurora, natural de un pueblo cerca de Reinosa y que según reconoce «no sabía» lo que era el TikTok antes de comenzar a salir en los vídeos.
Otros como José Luis confiesan que les «ha costado» entrar en el centro de día, porque estaban acostumbrados a una vida más independiente, pero reconocen que «es mejor que estar en casa solo» y disfrutan con los bailes.
En general, los usuarios dicen que la actividad les «anima mucho» y destacan que en el centro de día se encuentran bien, en compañía. «Hacemos de todo, cantar, bailar, cuando toca bailar nos encanta», explican.
Fuente: EFE