Artur Mas, condenado a dos años de inhabilitación por el referéndum del 9N
El ex presidente de Cataluña, Artur Mas, ha sido condenado a dos años de inhabilitación para ejercer cargos públicos por organizar el referéndum del 9N, según la sentencia dictada este lunes por unanimidad de los tres magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.
El ex presidente de Cataluña, Artur Mas, ha sido condenado a dos años de inhabilitación para ejercer cargos públicos por organizar el referéndum del 9N, según la sentencia dictada este lunes por unanimidad de los tres magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC). «La Sala Civil y Penal del TSJC, en sentencia de fecha 13 de marzo de 2017, ha condenado al ex president de la Generalitat de Catalunya Artur Mas i Gabarró como autor de un delito de desobediencia cometido por autoridad o funcionario público a las penas de multa de doce meses, con una cuota diaria de cien euros, e inhabilitación especial para el ejercicio de cargos públicos electivos ya sean de ámbito local, autonómico o estatal, así como para el ejercicio de funciones de gobierno tanto en el ámbito autonómico como en el del Estado, por tiempo de dos años», se recoge en la sentencia.
En la misma, la ex vicepresidenta Joana Ortega, ha sido condenada a un año y nueve meses de inhabilitación, mientras que para la ex consejera Irene Rigau, la inhabilitación es de un año y seis meses.
En sus primeras declaraciones tras conocerse la sentencia, Artur Mas ha comparecido junto a Rigau y Ortega, para reafirmar el proceso independentista avalado por la gente «que nos dijo ‘tirad para adelante’ y que no diéramos ni un paso atrás». El ex presidente ha denunciado que «se nos persigue por nuestras ideas y la ley no es igual para todos» pero que tanto él como las otras dos condenadas «recurriremos a las instancias europeas» en las que confían. Para ello, antes deberán recurrir al Tribunal Supremo y al Constitucional «sin esperanza», para poder llegar a Estrasburgo. «Haríamos lo mismo que hicimos, no nos arrepentimos«, ha dicho en otro momento el ex presidente de la Generalitat, para quien es evidente han sido condenados los tres «simplemente por defender ideas soberanistas que no gustan».
El tribunal considera que se produjo un delito de desobediencia grave al Tribunal Constitucional (TC) por parte de Artur Mas y sus ex colaboradoras al celebrar una consulta independentista declarada ilegal el 9 de noviembre de 2014, un delito por el que la fiscalía pedía para el ex presidente catalán 10 años de inhabilitación. Se les reprocha a los acusados el hecho de que, «lejos de hacer efectiva la suspensión ordenada por el Tribunal Constitucional, no solo no dictaron ningún tipo de resolución ni efectuaron anuncio alguno de suspensión del proceso participativo previsto para el día 9 de noviembre, sino que observaron un catálogo de conductas demostrativas todas de su determinación firme de contravenir la providencia del Tribunal Constitucional».
Del delito de prevaricación, el TSJC absuelve a los tres procesados. En este sentido, los magistrados declaran que «no se puede afirmar la presencia de elementos de ilegalidad que excedan o desborden la inherente al hecho desobediente ya calificado y sancionado como constitutivo de un delito de desobediencia» y, por lo tanto, no consideran aplicar «una condena añadida por el delito de prevaricación, pues no lo permite el principio non bis in ídem, que prohíbe castigar doblemente una misma conducta».
Reacciones
La decisión del tribunal catalán ha sido objeto de diversos comentarios por parte de dirigentes de otras formaciones políticas. En nombre de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), su portavoz nacional Sergi Sabrià, ha expresado su solidaridad con los tres, y ha calificado de «indigna y antidemocrática» la resolución del TSJC. «Los poderes del Estado no nos van a parar» en la voluntad de Cataluña «de poder decidir libremente» su futuro, ha añadido. El presidente de la Generalitar, Carles Puigdemont ha lamentado la sentencia, calificándola de «error«. «¡Qué error! Qué diferencia con las democracias consolidadas y saludables», ha escrito en su cuenta de Twitter.
El meu TL ho fa coincidir, i la comparació encara és més punyent. Quin error! Quina diferència amb les democràcies consolidades i saludables pic.twitter.com/Kyfrzkh1Ys
— Carles Puigdemont (@KRLS) March 13, 2017
«La justicia pone a cada uno en su sitio«, ha declarado Pablo Casado, que ha reiterado la posición conocida del PP en defensa de la unidad de España. «Esto demuestra que nadie está por encima de la ley», ha dicho en rueda de prensa el diputado y vicesecretario general de Comunicación popular. En nombre del PSOE, su portavoz en el Congreso, Antonio Hernando ha destacado el buen funcionamiento de la ley. «Lo que no se puede en un Estado de Derecho es estar vulnerando constantemente la ley y pensar que la Justicia no va a actuar», una opinión que no comparte el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, quien a través de un tuit ha calificado de «vergüenza» la sentencia. «Artur Mas es el heredero del pujolismo; una de las peores expresiones de la Trama, pero que le condenen por poner urnas es una vergüenza», ha escrito nada más conocer la sentencia.