Kevin Spacey y Harvey Weinstein se rehabilitan en la misma clínica
El actor Kevin Spacey no sólo comparte con el productor de Hollywood Harvey Weinstein recientes denuncias por abusos sexuales, sino la misma clínica de rehabilitación por adicción al sexo.
El actor Kevin Spacey no sólo comparte con el productor de Hollywood Harvey Weinstein denuncias por abusos sexuales sino el lugar donde se rehabilitan por adicción al sexo.
Se trata de The Meadows, un centro ubicado en Arizona que, según su página web, se define como «el principal centro de tratamiento hospitalario para la adicción al sexo de los Estados Unidos». También allí son atendidas personas que sufren de «adicción al amor».
El sitio ofrece un variado menú de terapias al que un paciente puede acceder previo pago de 37 mil dólares. Cada mes en el lugar cuesta 36 mil dólares, de acuerdo a The Daily Mail, que ha sido el primero en publicar la información.
Otros famosos como el golfista Tiger Woods, la modelo Kate Moss o la cantante Selena Gómez han pasado por esta institución para tratar algunas adicciones y depresiones. El blog de The Meadows celebra que uno de sus pacientes recuperados es el atleta y campeón olímpico de natación, Michael Phelps.
Según el mismo diario, Spacey llegó al centro a finales de la semana pasada, mientras que Weinstein fue visto allí poco antes.
El centro lleva adelante un tratamiento para adictos al sexo llamado The Gentle Path (el camino amable) que dura 45 días. Entre las actividades que estará realizando el actor de la aclamada serie de Netflix House of Cards están la equitación, el yoga, el tai chi, sesiones de arte expresivo y de mindfullness.
La página web ofrece algunos testimonios de personas que se han recuperado de esta adicción.
La terapia cuenta con la dirección del doctor Patrick Carnes, un especialista que tiene más de 30 años de experiencia en este tipo de trastornos.
«En una comunidad segura y enriquecedora, los hombres son guiados en su viaje de recuperación al examinar las causas subyacentes de sus adicciones y trastornos», señala la web oficial de la institución.
Y agrega: «La meta es que los individuos ganen confianza para hacer frente a la enfermedad, incluido el dolor y la pérdida. Trabajar para sanar un trauma emocional, y ser responsables de sus propios sentimientos».
En la clínica hay plazas para 28 pacientes masculinos -The Meadows separa a hombres y mujeres en sus programas de rehabilitación-, y allí son monitoreados las 24 horas. El programa incluye también un apoyo farmacológico con antidepresivos y hasta antiandrógenos para suprimir los impulsos sexuales.