La Unión Europea ha autorizado este lunes la fusión de los fabricantes de automóviles PSA (Peugeot, Citroën), francés, y Fiat Chrysler (FCA), estadounidense. La operación ha de estar, eso sí, sujeta a compromisos para proteger la competencia en los vehículos comerciales.
Por qué es importante: con la fusión, ambos grupos formarían el cuarto grupo automovilístico mundial. Los fabricantes prevén cerrar su proyecto de fusión en el primer trimestre de 2021. La nueva entidad se llamará Stellantis.
«Estamos en condiciones de autorizar la fusión entre Fiat Chrysler y Peugeot SA, pues sus compromisos facilitarán la entrada y expansión en el mercado de las camionetas comerciales ligeras. En los otros mercados en los que ambos fabricantes de automóviles ejerzan sus actividades, la competencia seguirá estando apoyada tras la fusión», ha declarado Margrethe Vestager, vicepresidenta de la Comisión encargada de competencia.
Los dos gigantes se han comprometido a extender el acuerdo de cooperación entre PSA y Toyota para los vehículos comerciales ligeros y a facilitar el acceso de los competidoras a las redes de reparación y mantenimiento de PSA y de FCA para ese tipo de vehículos, según un comunicado de la Comisión Europea. La unión de PSA y FCA, anunciada a finales de 2019, dará lugar al cuarto grupo automovilístico mundial en volumen y al tercero en facturación, y englobará a casas emblemáticas como Peugeot, Citroën, Opel, Jeep, Alfa Romeo y Maserati.