China anuncia una investigación tras la muerte del médico que alertó del coronavirus
La muerte del oftalmólogo ilustra la situación caótica de los hospitales de Wuhan, muy saturados
Las autoridades chinas han anunciado este viernes la apertura de una investigación por la muerte de un médico de Wuhan que fue sancionado por la Policía a finales de diciembre por haber alertado sobre la aparición del nuevo coronavirus[contexto id=»460724″] en el centro del país. El médico, Li Wenliang, murió este jueves en la ciudad epicentro de la epidemia, provocando la ira de muchos internautas chinos que ven en él a un héroe nacional.
Tras advertir que varios pacientes habían sido hospitalizados con síntomas similares al coronavirus del SARS —una epidemia similar a la actual surgida también en China entre 2002 y 2003—, alertó a varios compañeros de profesión, pero, posteriormente, la Policía lo acusó de difundir rumores, un cargo que en China puede suponer una pena de cárcel. Li, de 34 años, falleció en el Hospital Central de Wuhan, ciudad aislada del mundo desde el 23 de enero al igual que sus 11 millones de habitantes. El oftalmólogo contrajo la enfermedad tratando a una paciente.
«Es un héroe que dio la alarma y lo pagó con su vida», ha escrito uno de sus colegas de Wuhan en la red social china Weibo. «Que todos estos funcionarios que se enriquecen con dinero público mueran bajo la nieve», ha dicho un internauta, en un comentario borrado inmediatamente por los censores.
Su muerte ilustra la situación caótica de los hospitales de Wuhan, muy saturados. Un alto funcionario provincial reconoció el jueves que el personal médico no daba abasto y carecía de equipos para protegerse del virus. El caos se extendió también a los medios de comunicación. En un primer momento, medios públicos como la televisión nacional CCTV y el diario Global Times anunciaron la muerte del oftalmólogo y la Organización Mundial de la Salud (OMS) mostró su pésame en Twitter, pero luego el hospital aseguró que Li aún seguía con vida. Fue horas después cuando la clínica confirmó la muerte del médico.
Dos semanas después de que se impusiera la cuarentena de Hubei, la provincia donde apareció la neumonía viral, la epidemia ha contagiado a 31.161 personas en China continental, de las cuales 636 han muerto, según el último balance de las autoridades. En el resto del mundo, se han confirmado 240 casos de contagio en unos 30 países y territorios, dos de ellos mortales en Hong Kong y Filipinas. Cientos de turistas a bordo de tres cruceros están bloqueados en Asia por la aparición del virus a bordo.
En las últimas 24 horas, el número de víctimas de la epidemia aumentó en 73 muertos en China continental, incluidos 69 en Hubei. Además, las autoridades han contabilizado 3.143 nuevos contagios. De los más de 30.000 casos en total, 4.800 son graves. Además hay 26.000 casos sospechosos. La tasa de mortalidad del coronavirus, cercana al 2%, sigue siendo muy inferior a la del SARS (siglas en inglés de síndrome respiratorio agudo severo) que causó la muerte de 774 personas en todo el mundo entre 2002 y 2003.