Corea del Norte acusa a Seúl de entorpecer el proceso de paz con sus maniobras militares

El régimen de Corea del Norte ha acusado este domingo a Seúl de torpedear el clima de distensión entre ambos países a raíz del refuerzo de las capacidades del Ejército surcoreano con el despliegue de nuevos cazas furtivos y misiles de largo alcance. «Se trata de claras provocaciones contra las partes negociantes y de un peligroso movimiento en contra del actual ambiente de reconciliación y de unidad, que no se ha visto en mucho tiempo en la península de Corea», señala en un artículo el Rodong Sinmun, el diario oficial del Partido norcoreano de los Trabajadores.

El rotativo se refiere así a la decisión del Ejército surcoreano de desplegar sus primeros cazas furtivos, que serán presentados en una ceremonia prevista para esta semana, así como a su adquisición de 90 nuevos misiles Taurus aire-tierra de largo alcance, anunciada en febrero. «Las negociaciones y las maniobras para la guerra no pueden tener lugar al mismo tiempo», afirma el medio, que también advierte de que «perseguir opciones militares nunca funciona» contra el régimen.

Esta advertencia se produce en plena aceleración de los contactos bilaterales para celebrar la esperada cumbre entre el presidente surcoreano, Moon Jae-in, y el dictador norcoreano, Kim Jong-un, prevista para finales de abril. La reunión será la tercera entre mandatarios de estos países separados desde el fin de la Segunda Guerra Mundial y que permanecen técnicamente enfrentados desde la Guerra de Corea, tras las cumbres intercoreanas anteriores de 2000 y 2007, ambas celebradas en Pyongyang.

El acercamiento entre ambos países, propiciado por la celebración el pasado mes de los Juegos Olímpicos de invierno de PyeongChang (Corea del Sur), también ha dado lugar a que el líder norcoreano se ofrezca a reunirse en mayo con el presidente de EEUU, Donald Trump, para tratar la desnuclearización del régimen. En este contexto y de cara a ambas históricas cumbres, Corea del Sur y EEUU decidieron reducir sus aplazados ejercicios militares en territorio surcoreano, que comenzarán el 1 de abril.

La decisión de reducir la escala de estas maniobras anuales estaría destinada a mantener el clima de mejora de relaciones con Corea del Norte, que considera estos ejercicios como un ensayo para invadir su territorio y que en años anteriores ha respondido con pruebas de misiles.