El filósofo, escritor y colaborador de THE OBJECTIVE Diego S. Garrocho ha ganado el II Premio de Periodismo David Gistau. El premio lo ha recibido por el artículo Carta a un joven postmoderno, publicado en El Español, una tribuna en la que denuncia cómo la sociedad actual ha desactivado las armas intelectuales de la crítica.
«Este premio me hace especial ilusión por lo que significa y por quien lo inspira y le da nombre. David Gistau es casi una figura mitológica para mi generación. Inauguró un nuevo carisma periodístico y literario. Este reconocimiento también cobra un singular valor por Alberto Olmos, quien me precede en el premio y a quien admiro mucho, y por las personas que formaban parte del jurado. Ahora que hablo de admiración… me doy cuenta de que gran parte de las personas a las que admiro escriben columnas, y que forman parte de ese elenco», cuenta el premiado a THE OBJECTIVE.
«Esa tribuna es una confesión, un ajuste de cuentas con la frivolidad que muchas veces ejercemos desde las tarimas universitarias. Yo mismo he sido culpable. Lo que en un aula universitaria es un ejercicio de manierismo conceptual, puede convertirse una bomba de relojería si lo lanzamos contras las biografías reales de nuestros jóvenes», comenta sobre la columna que le ha valido el premio. «Vivimos en contexto de inflación moralista en la que el pulso destructivo, o deconstructivo, nos ha desposeído de algunos elementos que podrían dotar de una cierta estabilidad y sentido a las biografías y que eran valiosos. Me preocupa, además, que estemos proponiendo aproximaciones cuasi religiosas y fanatizadas a problemas que deberían ser estrictamente teóricos. La reacción airada y desmedidamente agresiva que generó aquella columna se mostró como una profecía que se cumple a sí misma», precisa el galardonado.
El jurado, compuesto por cuatro firmas de El Mundo y cuatro de ABC, ha destacado «el poso intelectual» y «el compromiso en defensa del pensamiento filosófico y ético» del autor en un momento en el que esta disciplina está siendo «orillada tanto en la Educación como en la vida cotidiana, especialmente en la de los más jóvenes». Jorge Bustos, Maite Rico, Antonio Lucas, Rafa Latorre, Juan Manuel de Prada, Mar Cohnen, Lorenzo Silva y Alberto Aguirre de Cárcer han sido los miembros del jurado este año.
Filosofía y opinión
Diego S. Garrocho Salcedo nació en Madrid en el año 1984. Antiguo alumno del I.E.S. Cervantes, es profesor en el Área de Ética y Filosofía Política en el Dpto. de Filosofía. Doctor Internacional en Filosofía por la Universidad Autónoma de Madrid, completó su formación en Francia, en la Université de la Sorbonne (Paris-IV), y realizó estancias de investigación en Estados Unidos, en Boston College y el Massachusetts Institute of Technology (MIT).
En los últimos años ha impartido asignaturas como Ética, Filosofía Política, Políticas de la Diferencia, Identidades Culturales Europeas o Teoría del Conocimiento y ha adquirido responsabilidades docentes en instituciones como la Escuela de Filosofía, el Centro de Estudios Garrigues o el Instituto Europeo de Humanidades entre otros.
Garrocho es además autor de las monografías Sobre la nostalgia. Damnatio Memoriae (Alianza, 2019) y Aristóteles. Una ética de las pasiones (Avarigani, 2015). Asimismo, ha coordinado la edición de los volúmenes Sócrates. La muerte del hombre más justo (Avarigani: 2015) y Europa: Tradición o proyecto (Abada, 2013) con los profesores Zamora y Rocco respectivamente. Realizó también la edición de Pardonner. L’impardonnable et l’imprescriptible de Jacques Derrida al castellano, y escribió con Jorge Pérez de Tudela el epílogo de esta edición bajo el título Aporéticas del Perdón.
Además, colabora frecuentemente con diversos medios de comunicación, como THE OBJECTIVE, donde escribe en la sección de opinión –elSubjetivo– desde principios de este año.
Sobre cómo es recibir un premio de estas características siendo filósofo, Garrocho asegura que la etiqueta de filósofo «le queda grande». «Sólo soy un profesor de ética de una universidad pública, la Autónoma de Madrid. En cualquier caso, estoy especialmente agradecido. Que un académico pueda recibir un premio de periodismo por sus columnas expresa una indudable generosidad por parte de quienes sí sois periodistas. Pese a todo, sí reivindico una cierta vocación pública y hasta política en quienes tenemos el privilegio de enseñar e investigar», dice.
Un premio conjunto en homenaje a Gistau
El galardón, creado de forma conjunta por los grupos Vocento y Unidad Editorial, está dotado con 10.000 euros. Patrocinado por Fundación ACS, Mapfre, Santander y Telefónica, este premio rinde homenaje al periodista David Gistau, que falleció en febrero de 2020. El ganador de la anterior edición, la primera, fue Alberto Olmos, por su artículo de opinión Cosas que los pobres deberían saber, publicado en El Confidencial.