'Belle': la película que desvela cómo será nuestro yo en el metaverso

Hablar de amor o metaverso puede estar algo trillado, pero, si se une a las animaciones del famoso estudio Studio Chizu junto al director Mamoru Hosoda, el resultado nos deja fuera del lugar común. Ese resultado tiene nombre: Belle.

Belle, que llega a España de la mano de Contracorriente Films y Sherlock Films, nos introduce en el universo de Suzu, una preadolescente muy insegura, huérfana de madre, que se introduce en el reino de la red social U, para convertirse en otra persona, aplacando los miedos que ha dejado la orfandad que vive en la realidad y, así, mostrar su verdadero yo, ese que en el fondo, le recuerda a su madre.

La máscara de Suzu en U se llama Belle, un avatar creado a semejanza de la chica que, Suzu cree, es la más guapa de su instituto, pero con sus pecas. Belle llega a este metaverso y muchos la observan, se ríen de sus pecas, pero su belleza y melodiosa voz la catapultan al estrellato compitiendo con otras «unstagrammers», porque lo más importante, es que en U nadie sabe la identidad del otro en el mundo real. Belle comienza a ganar una cantidad de seguidores infinita y como toda persona popular en redes, detrás hay una estratega del marketing liderada por su mejor amiga del instituto, persona encargada, como buena gen Z, de cambiar los trajes del avatar de Suzu, producir sus canciones, etc.

El giro de la historia sucede en uno de los conciertos de Belle, cuando este es interrumpido por un misterioso dragón cornudo y la autoproclamada Policía de U interviene y amenaza con atraparlo y exponer su verdadera identidad. Al comprender la protección que brinda la adopción de un avatar, Belle hace todo lo posible para protegerlo.

A partir de ese suceso, y como buena crítica de Studio Chuzu, U no es del todo perfecto. Si rompes las reglas, una especie de Policía autócrata, con guiños irónicos a la famosa serie animada Los caballeros del zodiaco, debe desvelar tu verdadera identidad. Es así como aparece la figura de la bestia y empieza a jugarse un paralelismo al personaje de Belle en el metaverso y en la realidad. Para no dar más información sobre la historía y hacer algún spoiler, lo interesante de la narración escrita por Hosoda radica en los interrogantes que suscita hoy día: ¿cuánta autenticidad perdemos por intentar adentrarnos en las capas de superficialidad que nos inculcan los espacios digitales? o ¿cuántas buenas relaciones y gente nueva podemos conocer gracias a las redes sociales? ¿Existen diferentes tipos de amor?

Hosoda, quien también dirigió Mirai, Wolf Children y Summer Wars, ha tomado internet como tema de sus películas desde Digiman: The Movie en 2002. Su fascinación con lo virtual como lugar donde emergen nuestros otros yo, encaja perfectamente en uno de los géneros modernos más dominantes del anime: isekai. Este género describe las transiciones y reencarnaciones de los personajes en otros mundos, particularmente los virtuales, donde exploran el amor, la amistad o las dolencias propias de la vida para terminar autorrealizándose. A pesar de esto, la lógica de Belle recae en la falsa idea de que las experiencias en línea de alguna manera no son la «vida real», algo que, quizás, a muchos millennials no les haría ruido, pero, a un Vtubing de la gen Z, que ha vivido gran parte de sus experiencias en lo digital, sí.

Sin embargo, más allá de una película muy colorida, típica de las animaciones japonesas dentro de un universo que está muy de moda en la actualidad, Belle es una historia sobre la experiencia del duelo materno y los amigos que te acompañan en el camino del héroe que se recorre al vivir ese dolor, ya sea en la realidad o en la virtualidad.

Belle llegará a los cines de España el 25 de marzo.