Muere Robbie Robertson, leyenda del rock y líder de The Band
Su legado se entrelaza con colaboraciones trascendentales junto a figuras como Bob Dylan y Martin Scorsese
El músico Robbie Robertson, durante el estreno de la película 'El Irlandés'. | Europa Press
El mundo de la música y el cine está de luto por la partida de Robbie Robertson, icónico guitarrista, compositor y cantante. Robertson, quien lideró a la influyente banda canadiense-estadounidense The Band, dejando gracias a ella una marca imborrable en la historia del rock, ha fallecido a los 80 años en Los Ángeles (EEUU) tras una larga enfermedad, según ha informado su familia en un comunicado. Su legado, que se entrelaza con colaboraciones trascendentales junto a figuras como Bob Dylan y Martin Scorsese, permanecerá sin embargo siempre entre nosotros.
Robbie Robertson nació en 1943 y desde temprana edad demostró un talento musical excepcional. Su virtuosismo en la guitarra es sobre todo conocida gracias a su trabajo dentro de The Band, un grupo que rápidamente se convirtió en un ícono de la escena musical de los años 70, creando himnos que capturaron el espíritu de la época y dejaron una marca duradera en la historia del rock.
Como compositor, es autor de canciones célebres como «The Weight», «The Night They Drove Old Dixie Down», «Up on Cripple Creek», «Rag Mama Rag», «Acadian Driftwood» y «Broken Arrow», muchas de ellas sobre episodios culturales y retratos tradicionalistas de la historia de Estados Unidos. Además, su trabajo como guitarrista ha sido reconocido por los críticos musicales y figura en el puesto 59 de la lista de los cien mejores guitarristas de todos los tiempos, elaborada por la revista Rolling Stone.
Sin embargo, el trabajo de Robertson fue mucho más allá de la icónica banda, sobre todo por una conexión con Bob Dylan que trascendió lo meramente profesional y acabó convirtiéndose en una colaboración única que transformó la música folk y rock. Robertson no solo contribuyó significativamente a la música de Dylan, sino que también compartieron momentos cruciales en la evolución cultural de la época, dejando una huella imborrable en la industria musical.
En este sentido, cabe destacar también su colaboración con Martin Scorsese, que sirvió para demostrar su versatilidad artística. Durante más de tres décadas, Robertson y Scorsese trabajaron juntos en proyectos cinematográficos que fusionaron la potencia de la música y la narrativa visual. En concreto, supervisó y produjo la música de proyectos del cineasta como Toro salvaje, El color del dinero, Gangs of New York, Shutter Island, Infiltrados y Silencio. De hecho, la esperada película del director neoyorquino Killers of the Flower Moon fue su proyecto final.
