Shakira: entre la remontada y la venganza
La cantante colombiana ha sido protagonista de 2023 con un éxito musical sin paliativos y un buen puñado de titulares
Lo de Shakira Isabel Mebarak Ripoll (Barranquilla, Colombia, 1977) en este año 2023 será estudiado no solo en las escuelas de música, sino sobre todo en las de negocios. Cuando arrancó el año, la cantante colombiana, con más de 30 años de carrera e incontables éxitos a sus espaldas, parecía encontrarse en uno de los puntos más bajos de su vida personal y profesional. Sin ningún disco de estudio desde 2017 y sin lograr ningún hit global desde 2015 con «La bicicleta», Shakira estaba además inmersa en un divorcio complicado con la que había sido su pareja durante años, el futbolista Gerard Piqué, a lo que se sumaba un complicado pleito con Hacienda por fraude fiscal. De hecho, y a pesar de innegables éxitos puntuales como su actuación en el intermedio de la Super Bowl de 2020, la colombiana parecía cada vez más una celebridad en decadencia destinada a copar ante todo los titulares de la prensa rosa y los programas del corazón, antes que una artista global sin problemas para rivalizar desde el mundo latino con otras divas como Beyoncé o Taylor Swift.
Sin embargo, en cuanto arrancó 2023, comenzó la remontada. Y todo gracias a una canción y un nombre propio: Bizarrap. El productor argentino, una fábrica de éxitos musicales andantes responsable de hits globales como el «Quédate» de Quevedo publicó nada más comenzar el año su colaboración con Shakira, que bajo el genérico nombre de «Shakira: BZRP Music Session #53» escondía una de las canciones más virales del año. Las cifras hablan por sí solas: en solo 24 horas el título se posicionó en el número uno de las plataformas de streaming, logrando en un día casi 100 millones de visitas en YouTube y 14,4 millones de streams en Spotify. Es más, en el momento de redactar este artículo, el tema más de 850 millones de reproducciones en la plataforma sueca y el vídeo, más de 650, por no hablar de los diversos premios que se ha llevado en galas y ceremonias.
¿El truco de la canción? Para empezar, una melodía increíblemente pegadiza que ha sonado en fiestas, bodas, bautizos, comuniones, pisos, tiendas, supermercados, reuniones de trabajo, eventos deportivos, patios de colegio, mansiones, universidades y hasta en algún velatorio. Los sintetizadores, el ritmo ochentero y sobre todo la melodía vocal de Shakira —con ese «uuuuUuuuUuu» en el estribillo— casi garantizaban por sí solos un hit de esos que tararean con igual pasión abuelos y nietos. Pero es que había un elemento más que terminó por catapultar la canción a las estrellas antes incluso de que se hubiera estrenado: el tema era una rajada nada velada de la colombiana contra su expareja Piqué, desvelando trapos sucios y cargando incluso contra la nueva novia del futbolista, que de la noche a la mañana pasó a ser una celebridad pública.
«Tanto que te las das de campeón. Y cuando te necesitaba diste tu peor versión». «A ti te quedé grande y por eso estás con una igualita que tú». «Tiene nombre de persona buena. Claramente no es como suena». «Mucho gimnasio, pero trabaja el cerebro también». Y, sobre todo, la ya mítica «una loba como yo no está pa’ tipos como tú». Todas las frases de la canción iban directas al corazón de la relación, aireando las intimidades de la que había sido una de las parejas más famosas de España. El tema hizo correr ríos de tinta en las distintas cabeceras de prensa, hizo girar en bucle tertulias de televisión y estremeció las redes sociales, generando un debate sobre si era correcto o no lo que había hecho Shakira, además de discutir sin pudor sobre los últimos y difíciles años del matrimonio.
Desde luego, no es la primera vez que se compone una canción cuyo tema central es el despecho, pero la articulación de esta auténtica venganza musical ha sido algo nunca antes visto: días antes de que saliera la canción ya se estaban filtrando partes de la letra y, en cuanto se publicó, todos los medios e influencers se lanzaron a discutir el significado de cada una de las palabras del tema. Es lógico: no había prácticamente otro tema de conversación en la esfera pública, todo el mundo parecía querer hablar solo de «lo de Shakira y Piqué». De hecho, su ubicuidad fue tan brutal que el tema tiene ya cuatro récords Guinness, incluyendo Canción de música latina más reproducida en Spotify en 24 horas (14.393.324), el tema musical más visto en YouTube en 24 horas (53.000.000) en español, y a la vez el más rápido en español en alcanzar 100 millones de vistas en YouTube (en dos días y aproximadamente 22 horas), así como también la canción en español más reproducida en Spotify en una semana (80.646.962).
Tras este espectacular mes de enero, poco más tenía que hacer Shakira para que 2023 fuese su año. Ni siquiera ha hecho falta que saque disco: le ha valido con un par de singles más — «TQG» junto a Karol G, «El jefe» con los mexicanos de Fuerza Regida— para mantenerse en el candelero, a la espera de ver si en 2024 aprovecha el momentum que parece haber cogido su carrera para lanzar otro álbum y una larga gira global. Y es que 2023 parece ser el año que el mundo ha redescubierto a Shakira, que recordemos era una estrella global con éxitos inapelables mucho antes de siquiera conocer a Piqué. Los homenajes y los premios se han sucedido sin cesar, aunque en España parece que la hemos perdido para siempre: la artista se ha ido a vivir a Miami, capital de la música latina, tras años de vivir en Barcelona.
Pacto con Hacienda y premios
Eso sí, su salida de España se produjo también en torno a otra noticia que copó la actualidad nacional: su pleito con Hacienda. El pasado 20 de noviembre, la cantante aceptó pagar una multa millonaria a cambio de una rebaja de condena que evitaba su entrada en prisión, tras admitir ante la Audiencia de Barcelona que defraudó 14,5 millones a Hacienda entre los años 2012 y 2014. A pesar de todos los esfuerzos dedicados a defender su inocencia, el proceso penal y la presión de la Agencia Tributaria durante unos largos cinco años de proceso, la artista decidió finalmente zanjar el problema con un pacto amistoso, alegando una «enorme pérdida de tiempo y recursos» además de «la necesidad de priorizar su carrera y su estabilidad y la de sus hijos».
Y es que, al mismo tiempo que resolvía este problema, su carrera volvía a despegar hacia las estrellas, convirtiéndola de nuevo en una de las figuras más cotizadas del panorama musical internacional. Shakira fue la sensación de los Premios MTV 2023 y los Billboard, donde fue galardonada con el Video Vanguard Award en los primeros y con los premios a la Artista Solista Latin Pop del Año y Canción Latin Pop del Año. Para rematar, su polémico tema le reportó dos premios en los Grammy Latinos 2023: Mejor Canción Pop y Canción del Año. Una ocasión que aprovechó para volver a España, aunque en este caso a Sevilla, donde se celebraba la gala y donde, con su canción «Acróstico» y junto a sus hijos Milan y Sasha, puso a bailar a artistas de talla mundial, entre ellos, a los que algunos consideran la otra figura musical del año: Taylor Swift. Y eso que la de Nashville todavía podría aprender bastante de la capacidad de aguante y el arte para la remontada de su homóloga colombiana.