La guía definitiva para evitar errores con ‘-c’ y ‘-cc’ al escribir
Conocer las normas ortográficas resulta fundamental para una correcta escritura y uso de la lengua española

Ortografía. | (Canva)
La ortografía del español conlleva ciertas dudas a la hora de escribir, que aunque sutiles, pueden marcar la diferencia entre una escritura impecable y una plagada de faltas. Uno de los problemas más comunes es distinguir cuándo utilizar una sola «c» y cuándo emplear la doble «cc». Este detalle, aparentemente menor, puede alterar el significado de las palabras y afectar la claridad del mensaje.
Dominar las normas ortográficas no solo es una cuestión académica, sino también una herramienta fundamental para la comunicación efectiva. En un mundo donde la escritura digital predomina, mantener una ortografía correcta refleja profesionalismo y respeto hacia los lectores.

Trucos para saber cuando una palabra lleva «-cc»
A continuación, se presentan reglas que facilitarán la correcta utilización de «-c» y «-cc», acompañados de ejemplos prácticos y las excepciones a la norma:
1. Palabras terminadas en «-cción» derivadas de verbos con «-ct-»
Cuando una palabra termina en «-cción» y proviene de un verbo cuya raíz contiene «-ct-», se escribe con doble «c». Este patrón ayuda a identificar la necesidad de duplicar la consonante en sustantivos derivados. Como ejemplo de ello:
- Actuar → Acción.
- Conectar → Conexión.
- Instruir → Instrucciones.
2. Sustantivos terminados en «-cción» relacionados con verbos en «-ar»
Muchos sustantivos que terminan en «-cción» se derivan de verbos que finalizan en «-ar». Reconocer esta relación facilita la correcta escritura de estos términos. Por ejemplo:
- Comunicar → Comunicación.
- Educar → Educación.
- Organizar → Organización.
3. Uso de «-cc-» en palabras técnicas o científicas
En terminología especializada, especialmente en campos como la medicina o la ciencia, es común encontrar palabras con «-cc-». Por eso, familiarizarse con estos términos ayuda a evitar errores en contextos académicos o profesionales. Muestra de ello son:
- Infección.
- Convección.
- Proyección.
Las normas que indican que las palabras van con «-c»
1. Palabras terminadas en «-ancia», «-encio», «-encio»
Se escriben con «c» las palabras que terminan en estos sufijos, con algunas excepciones. Ojo, que hay dos excepciones, «ansia» y «hortensia». Algunos ejemplos de la norma son:
- Constancia.
- Silencio.
- Conciencia.
2. Adjetivos terminados en «-oso» derivados de sustantivos en «-ción»
Cuando un adjetivo se forma a partir de un sustantivo terminado en «-ción», se escribe con «c». Un ejemplo de ellos, son estos casos:
- Ambición → Ambicioso.
- Precaución → Precavido.
- Pasión → Apasionado.
3. Diminutivos terminados en «-ecillo», «-ecilla»
Los diminutivos que terminan en estos sufijos se escriben con «c». Por ejemplo:
- Pez → Pececillo.
- Flor → Florecilla.
- Pan → Panecillo.
Las 22 faltas de ortografía más comunes
Estos errores son frecuentes y pueden evitarse con una revisión cuidadosa y el uso de herramientas de corrección ortográfica:
- Confundir «a ver» con «haber».
- Escribir «valla» en lugar de «vaya».
- Usar «haya» por «halla» o viceversa.
- Escribir «echo» en lugar de «hecho».
- Confundir «ahí», «hay» y «¡ay!».
- Escribir «llendo» en lugar de «yendo».
- Agregar una «s» innecesaria: «dijistes» en lugar de «dijiste».
- Usar mayúscula después de dos puntos cuando no corresponde.
- Escribir los meses con mayúscula inicial.
- Confundir «sino» y «si no».
- Escribir «preveer» en lugar de «prever».
- Confundir «porqué», «porque», «por qué» y «por que».
- Escribir «sobre todo» como «sobretodo».
- Confundir «como» y «cómo».
- Escribir «selfie» en lugar de «selfi».
- Usar «convalecencia» con una «s» adicional.
- Escribir «idiosincracia» en lugar de «idiosincrasia».
- Confundir «acérrimo» con «aférrimo».
- Escribir «beneficiencia» en lugar de «beneficencia».
- Usar «subrealista» en lugar de «surrealista».
- Confundir «vaya» con «baya» o «valla».
- Escribir «agilar» en lugar de «agilizar».
¿Qué es la ortografía y para qué sirve?
Es el conjunto de normas que regulan la escritura correcta de una lengua. Su función principal es garantizar la claridad y comprensión en la comunicación escrita. Una ortografía adecuada facilita la lectura, evita ambigüedades y refleja el nivel educativo y profesional del escritor. Además, es esencial en contextos académicos y laborales, donde una escritura correcta puede influir en la percepción y credibilidad del autor.
Distinguir entre el uso de la «-c» y «-cc» puede parecer complejo, pero con el conocimiento de las reglas y la práctica, es posible dominar este aspecto de la ortografía española. Aplicar los trucos y normas mencionados no solo mejora la calidad de nuestros textos, sino que también refleja un compromiso con la precisión y el respeto por el idioma. Recordemos que una buena ortografía es una carta de presentación que habla por nosotros en cada palabra escrita.