Edu Lorrio: «Sentí felicidad y alivio al conseguir por fin la medalla de oro de waterpolo»
El portero ha conversado con THE OBJECTIVE en sus primeras horas de vacaciones tras este momento tan inolvidable
Han tenido que pasar dos décadas para que el waterpolo español alcance de nuevo la cima. El madrileño Edu Lorrio se convirtió en el héroe de la final ante Italia parando el penalti decisivo en la tanda final. Ha conversado con THE OBJECTIVE en sus primeras horas de vacaciones tras este momento tan inolvidable.
PREGUNTA. ¿Con la calma del paso de las horas, que sensaciones te pasan por la cabeza?
RESPUESTA. La sensación de haber conseguido un logro histórico para el waterpolo y el deporte español en general.
P. ¿Eres consciente de que eres un héroe, que ya formas parte de la historia del deporte español?
R. Bueno…, no me considero un héroe, me considero una parte importante en la consecución de este logro al igual que el resto de mis compañeros. Aunque es cierto que parar ese último penalti fue la guinda del pastel.
P. ¿Qué sentiste al detener el penalti decisivo?
R. Sentí una mezcla de felicidad y alivio al saber que por fin habíamos conseguido una medalla de oro.
P. ¿Cuándo decides que le vas a decir al entrenador que quieres salir porque estás convencido que puedes aportar?
R. Una vez terminados los 32 minutos de juego y antes de empezar la tanda de penaltis le comuniqué que tenía una buena sensación y la confianza para parar un penalti.
«No sentí miedo para nada»
P. ¿No sentiste miedo, exceso de responsabilidad?
R. No lo sentí para nada. Mis sensaciones siempre fueron de motivación y confianza para parar el penalti.
P. ¿Este tipo de comportamiento dónde se aprende?
R. Creo que este tipo de cosas no se aprenden, sino que van en la forma de ser de cada persona y en ese momento me salió transmitirlo así.
P. ¿Vas a un psicólogo para reforzar tu comportamiento en la piscina?
R. No actualmente, pero sí fui en el pasado. Valoro mucho la importancia de este tipo de ayudas y refuerzos en el deportista y la persona en general.
P. ¿Visteis peligrar la final?
R. Creo que fuimos superiores durante la mayor parte del partido, aunque es cierto que en los últimos minutos Italia se acercó en el marcador hasta empatarnos, por lo que en esos momentos sí que hubo unos minutos de dudas y se vio reflejado en el juego.
«Cuando ganamos el último oro estaba en el colegio y no jugaba el waterpolo»
P. Han tenido que pasar 21 años para volver a ganar un oro en unos mundiales. ¿Dónde estabas entonces cuando se logró el último?
R. Por aquel entonces estaba en el colegio y no jugaba a Waterpolo, y esto denota la dificultad de ganar un oro mundial.
P. Estamos en la mejor generación de jugadores de la historia… Te he leído que este oro compensa todas las platas anteriores, y además siempre con Italia como verdugo… ¿No os habéis quitado un peso de encima?
R. Sí, nos hemos quitado un peso de encima ya que en las últimas citas hemos perdido todas las finales. En el último Mundial en Corea fue contra Italia y perdimos, así que con más razón nos hemos quitado esa espinita.
P. ¿Habéis llegado a tener miedo escénico con los italianos?
R. No, para nada. Italia es un rival muy competitivo con una calidad muy alta pero siempre hemos pensado que podemos competir de tú a tú con cualquier selección.
«Ser portero tiene un componente psicológico importante y de gran responsabilidad»
P. ¿Por qué acabas y cuándo jugando al waterpolo?
R. Yo comencé nadando en mi colegio con un entrenador de waterpolo que, debido a mi altura y envergadura ya desde niño, en el año 2004 me invitó a probar. Desde entonces y hasta ahora, ha sido y es mi pasión.
P. ¿Por qué España es una potencia mundial en este deporte?
R. Creo que influyen varios factores para poder aspirar a ser una potencia mundial. En primer lugar, una importante tradición y cultura en este deporte. En segundo lugar, el poder desarrollar desde niño a través de centros de alto rendimiento el waterpolo a nivel profesional. Y, por último, la cantidad de clubes de waterpolo que hay repartidos por toda España.
P. ¿Y por qué de portero? ¿Qué tiene esta posición que la hace diferente?
R. La persona que me invitó a jugar a waterpolo cuando era un niño, debido a mis cualidades físicas, decidió que empezara ya como portero. Así que desde entonces no he salido de la portería. El ser portero tiene un componente muy psicológico y de gran responsabilidad, pero a mí me gustó desde el inicio y me encanta esta posición.
P. ¿No os sentís un poco defraudados? Hoy sois héroes, pero mañana volveréis al anonimato.
R. Por desgracia, esta es la realidad de nuestro deporte, vivimos en un país en el que la mayor parte del noticiero deportivo se lo lleva el fútbol, sin dar voz en muchas ocasiones a la cantidad de éxitos que consiguen el resto de deportes.
P. En tu caso, encima trabajas muy lejos de casa. Medio año sin ver a tu familia. ¿Como se lleva eso? ¿Compensa ese sacrificio?
R. Estar lejos de la familia nunca es fácil ya que en muchas ocasiones necesitarías que estuvieran más cerca, pero es una decisión que tomé hace ya seis años con el objetivo de poder seguir desarrollando mi deporte a nivel profesional. De este modo, sí que creo que el fin justifica los medios.
«Nunca me he planteado el tirar la toalla»
P. ¿Cuántas veces has pensado en tirar la toalla?
R. Nunca me he planteado tirar la toalla a pesar de haber tenido alguna decepción importante en mi carrera. Esto es debido al espíritu de sacrificio y constancia que mi familia me ha inculcado desde pequeño.
P. ¿Hasta cuándo te ves jugando?
R. Me veo jugando al waterpolo hasta que mi cabeza y las condiciones deportivas me lo permitan.
P. ¿Y luego, qué..?
Espero durante los años previos a mi retirada poder haber encaminado mi futuro fuera del waterpolo. Soy graduado en Criminología y quién sabe si en un futuro me podré dedicar a ello.
P. Una frase…
R. Somos campeones del mundo.