La FIFA responde a la guerra de Ucrania ante la continuidad del conflicto
El máximo organismo del fútbol extiende las excepciones aprobadas tras el inicio del conflicto el 24 de febrero del 2022
El 24 de febrero del 2022 se produjo un hecho que hizo cambiar el orden del mundo: la invasión de Rusia a Ucrania. Un conflicto que, más de un año después, sigue sin solucionarse y donde, entre los múltiples ámbitos de la vida afectados, está también el mundo del fútbol. Desde un primer momento tanto la FIFA, como máximo organismo del fútbol mundial, como la UEFA, en tanto que asociación europea dependiente, adoptaron medidas encaminadas tanto a la liga ucraniana como a la rusa.
En el caso del país invasor, todas ellas han ido encaminadas a la exclusión de los clubes y selecciones nacionales de todas las competiciones. En el caso de Ucrania, han puesto de su parte para que las competiciones ucranianas puedan seguir pero que los jugadores extranjeros que militan en esta liga pudieran dejar sus clubes mientras continúe esta situación bélica. Una salida idéntica para los jugadores no rusos que participan en la liga del país invasor.
Ya en marzo de 2022, la Mesa del Consejo de FIFA decidió modificar temporalmente el Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores del máximo organismo del fútbol mundial para proporcionar seguridad jurídica urgente como consecuencia del conflicto bélico.
Posteriormente, el 20 de junio de 2022, la Mesa del Consejo decidió prorrogar estos cambios hasta el 30 de junio de 2023. La situación actual con la guerra en Ucrania ha dado lugar a que la FIFA tenga que aclarar más aún la aplicación de las excepciones, en particular su posible aplicación después del fin de la prórroga. Como consecuencia de todo ello, y teniendo en cuenta el mercado de fichajes de verano que acaba de abrirse el pasado 1 de julio, han entrado en vigor una serie de actualizaciones, a las que ha tenido acceso THE OBJECTIVE.
Las más importantes, y con carácter temporal, afectan a los contratos de trabajo de jugadores y entrenadores extranjeros que siguen afiliados a la liga ucraniana y rusa. La solución pasa por prolongar la situación de aquellos que el 30 de junio del 2022 (justo ahora hace poco más de un año) decidieron abandonar ambas ligas por el conflicto bélico y que, dada la situación, no quieren volver al club ucraniano o ruso de origen. La actualización de FIFA les permite extender esta situación hasta el 30 de junio del 2024.
Con el objetivo de garantizar que los jugadores y entrenadores ejerzan su derecho a suspender sus contratos de trabajo de manera clara y oportuna, el jugador o entrenador ha tenido que informar por escrito al club de la suspensión unilateral antes del pasado 1 de julio de 2023 para poder suspender válidamente el contrato de trabajo.
Limitaciones de la norma
La FIFA ha introducido algunas limitaciones al ámbito de aplicación de esta norma. Así, los jugadores y entrenadores que, a pesar de la escalada de la guerra en Ucrania, hayan decidido permanecer en Ucrania o Rusia pese a la opción que tuvieron el verano pasado, no pueden ampararse a esta medida este verano del 2023. Si actualmente juegan en la liga rusa o ucraniana, no podrán acogerse a esta medida. También afecta a los contratos de trabajo de dimensión internacional de jugadores o entrenadores que hayan sido firmados o prorrogados después del 7 de marzo de 2022.
Aclaraciones sobre la indemnización
Además, la FIFA ha aclarado que, dadas las circunstancias, el nuevo club no deberá pagar ninguna indemnización por formación a un jugador que se inscriba por primera vez como profesional. Esto afecta a un jugador que es inscrito en un club no afiliado a la federación ucraniana o rusa que haya abandonado el territorio alguno de estos países con posterioridad al 7 de marzo de 2022 y se le permitió ser inscrito en un nuevo club extranjero.
También afecta al jugador que abandonó el territorio de Ucrania o Rusia tras el 7 de marzo de 2022 y ahora desea ser inscrito por primera vez como profesional en un club afiliado a la federación rusa o ucraniana.