Mercedes empieza a barajar la posibilidad de entregarse a Fernando Alonso
Si la marca entiende que el equipo Mercedes no va a ganar carreras, pero Aston Martin sí podría, los mejores motores serán para el piloto asturiano
Fernando Alonso bebe agua tras el Gran Premio de Bahréin. | Europa Press
«Podemos tirar nuestro coche a la basura». Con esta contundente frase respondió Toto Wolff, director de la escudería Mercedes, al canal Servus TV austriaco en una entrevista. «Hay un equipo muy por delante. Juegan con la competencia, ni siquiera tienen desgaste de los neumáticos», añadió frustrado ante el dominio de Red Bull. El directivo le grita a su suerte en referencia a los campeones del año pasado, pero calla a la hora de hablar de Fernando Alonso y Aston Martin, cliente al que de momento tienen por delante.
En el seno de la formación verde creen que las dos próximas carreras serán clave en el devenir de su concurso en el Mundial de Fórmula 1, por eso Fernando Alonso afirma que en la prueba inaugural fueron fuertes en aspectos que tal vez no encuentren en las dos próximas dos citas. Si su coche responde bien en Jeddah y Australia, más complicados para las características de su mecánica, serán optimistas para el resto del calendario. Lo que no dice es que en esas dos carreras podrían pasar más cosas, pero no a él, sino a su enemigo en pista: Mercedes.
La formación de Lewis Hamilton se ha encontrado con un coche que ya no padece el temido porpoising, esa suerte de cabeceo a alta velocidad que traía de cabeza a técnicos y pilotos. Lo que tampoco se han encontrado es la velocidad que esperaban en un monoplaza que acabó muy bien la temporada anterior, y que por poco no arrebata en las pruebas finales el segundo puesto a Ferrari.
Mensaje desde Alemania
En Brackley, localidad donde tiene sede la escudería Mercedes, han recibido un incomodante mensaje desde la sede principal de la marca: tienen dos carreras para recuperar el resuello. O esto cambia de forma visible, o las atenciones deberán dirigirse hacia Aston Martin, equipo de cuya marca matriz son accionistas y proveedores. El mensaje no ha sentado bien en el seno de la formación, y están a punto de decidir cuando introducen un coche alternativo al actual.
El F1 W13 del año pasado fue presentado en los test de pretemporada de Bahréin y corrió el rumor, ante lo exótico de su arquitectura sin pontones laterales, que sería un segundo más rápido que el más convencional que mostraron en la primera tanda de pruebas en Barcelona, España. Fue poner el coche sobre el asfalto y fueron conscientes de manera instantánea que ese fue justo el perjuicio de tiempo que encontraron con respecto a los más rápidos, un segundo. Desde entonces mejoraron mucho su diseño a base de elevar la panza con respecto al suelo, para recabar una única victoria en Brasil a manos de un inspirado George Russell.
Este año han prolongado el radical diseño pero sin éxito, así que todo indica que cambiarán hacia otro concepto que ya tienen metido en el túnel de viento, lo que no se sabe es cuando. Lo que si se sabe es que hay tensión en la sede del equipo y se dice que van a empezar a rodar cabezas en breve, empezando por la sección de aerodinámica. En ella, sus técnicos se quejan de que las herramientas que usan son obsoletas y muchas no están actualizadas desde 2014, lo que significa toda una eternidad desde el punto de vista tecnológico.
Beneficios para Aston Martin
Mercedes es un equipo de carreras y al mismo tiempo proveedor de motores de su clientela. Cuando salen propulsores de su factoría de Brixworth, los mejor producidos y que arrojan mejores cifras, van a parar en buena lógica a la propia Mercedes. Todos se construyen bajo un mismo patrón, por las mismas manos, y con los mismos materiales. A pesar de ello, es habitual que por desviaciones, imprecisiones o falla de los materiales haya pequeñas diferencias que entran dentro de las tolerancias admitidas por el ente regulador.
El mejor motor que llevaba Lewis Hamilton en la prueba inaugural, por ejemplo, entregaba 3 kW más que el mejor de los Aston Martin, lo que equivale a unos cuatro caballos de potencia. Esto entra dentro de lo aceptable, ha ocurrido siempre, y con todos los proveedores. Los segundos van a Aston Martin, y esto es lo que podría cambiar, para que esta dirección se invierta en su sentido. Si la marca entiende que el equipo Mercedes no va a ganar carreras con ellos, pero Aston Martin si podría, ya han recibido la comunicación de que empiecen a pensar en esto a partir de la cuarta cita del mundial.
Cada motor sale de la fábrica con nombre y apellidos grabados en su caja protectora, a los que se hace un exhaustivo seguimiento, y se sabe que los mejores, dentro de los que recibe Aston Martin, van a parar al compañero de Alonso, Lance Stroll. Tras ver los resultados de los test y primera carrera, esto también podría cambiar. Alonso no solo podría obtener mejores réditos gracias a ellos, sino que además los utiliza de forma diferente. Con base en los resultados, resulta obvio que sus indicaciones son las más productivas.
Cada vez que Fernando se sube a su coche pide al ingeniero de motores que tiene asignado un mapa de motor muy concreto, y distinto al de todos los demás. El mapa de motor es una serie de instrucciones parametrizadas que reordenan el comportamiento general de la ignición de los cilindros, los tempos por los que pasa su ciclo de combustión y la clave: la forma de recuperación y entrega de la energía eléctrica del ERS.
Alonso tiene un enfoque único
Una fuente anónima nos cuenta que «Alonso es el único de los que usa motores Mercedes en emplear el mapa motor de esta forma. Es la fórmula más hábil a la hora de utilizar la energía y recuperarla. Se llama deployment and harvesting map [mapa de entrega y recaudación de la energía]. Denota inteligencia por su parte. Hay que entenderlo muy bien para emplearlo correctamente en pista.
Digamos que en las curvas 12 y 13 de Bahréin le gusta administrar esta potencia extra. Otros pilotos la emplearon de manera preferente en otro sitio, en las rectas sobre todo, para tener más velocidad punta. Es una visión más simple. Él incrementaba la suya en el paso por curva, donde no lo hacía nadie».
Alonso posee muchos valores al volante, pero el mejor de todos es la experiencia. Con dos décadas en la categoría, nadie posee su capacidad de análisis, de entender las carreras, e incluso de controlar qué es lo que están haciendo los demás participantes. A través de mensajes de radio con su ingeniero de pista este pasado fin de semana, le daba indicaciones sobre el estado de los neumáticos de otros pilotos, lo que no deja de ser sorprendente.
Si finalmente el bicampeón acabara recibiendo ayuda de Mercedes, se colocaría en una posición preferente a la hora de llevar su coche un poco más allá. Ya ha llegado el primer pódium de los varios que presumiblemente recaudará este año. La siguiente pregunta sería ¿para cuándo la primera victoria? Sí, es posible, y con esas futuras atenciones, un poco más.
