Preocupación por las bajas audiencias de La Liga en las primeras tres jornadas
Los altos precios y la fuga de talento, entre las causas principales
Sin contar los de esta jornada, aún por terminar, ya se han disputado 30 partidos de LaLiga EA Sports y ninguno ha superado el 8% de cuota de pantalla. Unas cifras de audiencia televisiva que, si bien pueden estar algo condicionadas por el periodo vacacional para muchos españoles, preocupan en el sector.
En las tres primeras jornadas del campeonato, el encuentro más visto fue el debut liguero del FC Barcelona en el campo del Getafe, que atrajo a 752.000 espectadores (8% de share), según el portal especializado FórmulaTV. También con un 8% de cuota de pantalla se sitúa el Almería-Real Madrid, que sin embargo congregó a bastantes menos televidentes, un total de 588.000; el partido del equipo blanco que más espectadores vieron fue el del Celta, con una audiencia de 700.000 personas.
Pero se hacen necesarias las comparaciones. Por ejemplo, el Barça jugó el pasado domingo ante el Villarreal, un vibrante partido con numerosas alternativas y hasta siete goles. Pues bien, el encuentro entre azulgranas y amarillos sólo atrajo a 648.000 espectadores (7,1%) y fue superado por el Gran Premio de Países Bajos de Fórmula 1, con el segundo puesto de Fernando Alonso. En comparación, el mismo partido de la primera vuelta de la temporada pasada (FC Barcelona 3-0 Villarreal) fue visto por 711.000 personas y el de hace dos (Villarreal 1-3 FC Barcelona), por 1.029.000 televidentes, un 59% más. Por otra parte, la media de espectadores de los partidos del Barça superó el curso pasado el millón de televidentes y los del Real Madrid, los 900.000.
Cabe, por tanto, preguntarse por las causas de estas caídas en las audiencias del fútbol. El primero de ellos es la subida de precios de los operadores que ofrecen los partidos de LaLiga, Movistar+, Orange y Dazn, que, en un contexto de inflación, ha hecho que muchos se planteen el abandono de su suscripción.
Tanto Movistar+ como Orange han incrementado sus tarifas. La primera ofrece el fútbol por 113,90 euros al mes y la compañía naranja, por 105. Cabe aclarar que en el precio de ambas van incluidos otros servicios como la línea móvil, internet o una amplia oferta de canales de televisión. Por su parte, Dazn, que sólo ofrece la mitad de los partidos, es la que más ha subido sus precios en términos porcentuales. Ahora, su suscripción cuesta entre 30 y 40 euros mensuales, según el plan que se escoja. España es así el país de las grandes ligas donde más se paga por el fútbol, por los 85 euros de Inglaterra, los 50 de Alemania o los 38 de Francia.
Fuga de talento
El otro gran motivo del desapego de las audiencias es la pérdida de atractivo de nuestra liga por la creciente incapacidad de los equipos españoles de atraer o retener jugadores de talento. Esta temporada, equipos como Betis, Granada, Alavés, Getafe, Girona o el mismo Barça tienen o han tenido dificultades para inscribir a sus jugadores por las exigencias del fair play financiero.
Además, son varios los jugadores de renombre que han abandonado nuestra liga, destacando los casos de Gabri Veiga (del Celta al Al Alhi saudí), Sergio Canales (del Betis al Monterrey mexicano), Pau Torres y Samu Chuwueze (del Villarreal al Aston Villa y al Milán respectivamente) o Bono (del Sevilla al Al Hilal saudí). Ni siquiera Barça y Real Madrid han aguantado el tirón, con las pérdidas de Marco Asensio, Eden Hazard, Karim Benzema, Ousmane Dembelé, especialmente involuntarias las dos últimas.
A cambio, los dos grandes clubes de nuestra liga sí han traído a dos grandes jugadores, pero uno aún está por consolidar (Jude Bellingham) y otro ya tiene 32 años (Ilkay Gündogan). Las dificultades económicas del Barça y el cambio en la política de fichajes del Real Madrid —centrada ahora en captar talento joven más que en jugadores ya consagrados— hacen que la era de Messi y Cristiano, que hizo de la española la mejor liga del mundo durante casi una década, quede muy lejos. Además, a pesar de los afanes del Real Madrid, nuestra liga no ha conseguido atraer a los dos jugadores llamados a dominar el fútbol en la próxima década, Kylian Mbappé y Erling Haaland.