Markel Zubizarreta, el artífice del mejor Barça, estará al mando del fútbol femenino español
Fue clave en la construcción del rey europeo, ahora llega a una federación en reconstrucción tras el ‘caso Rubiales’
Markel Zubizarreta, nuevo director de fútbol femenino de la RFEF. | Angel Martínez / RFEF (EFE)
Montse Tomé tiene nuevo jefe. Mientras que en la etapa Rubiales todo el poder del fútbol femenino de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) lo concentraba una sola persona, el exseleccionador y exdirector deportivo Jorge Vilda, ahora parece que desde la casa del fútbol español quieren hacer las cosas de otra forma. De ahí el nombramiento –un secreto a voces que adelantamos hace meses en THE OBJECTIVE– de Markel Zubizarreta como nuevo director de fútbol femenino.
La decisión, defiende la RFEF en un comunicado, «se enmarca dentro de una profunda reestructuración para potenciar este departamento». Zubizarreta, con «una amplísima trayectoria en este campo», pasará a dirigir el departamento que ha trabajado «por la consolidación y el desarrollo del fútbol femenino en España, logrando éxitos y triunfos en todas las categorías. La hasta ahora directora de fútbol femenino, Ana Álvarez, pasará a ser responsable del desarrollo de este área», reza el comunicado. Gran parte de la prensa especializada y de la afición aplaude este fichaje, considerado estrella por muchos. Pero, ¿quién es Markel Zubizarreta?
Artífice del éxito del mejor club español de la historia
Markel Zubizarreta (Mondragón, 1985) lleva el fútbol en las venas. Hijo del legendario guardameta Andoni Zubizarreta, Markel dio sus primeros pasos en el mundo del fútbol bajo los tres palos en categorías inferiores. Aquello no duró demasiado y, tras colgar los guantes, centró su carrera en los despachos, en la gestión deportiva. Una decisión acertada, y es que es en esos despachos donde Markel ha conseguido destacar. Tras licenciarse en INEF y realizar un Máster en Gestión Deportiva, acumuló experiencia en una firma dedicada a actividades deportivas y educativas antes de unirse al FC Barcelona en 2015 como encargado del equipo femenino. Un Barça que no era, ni de lejos, el referente mundial que es ahora.
Zubizarreta se unió al FC Barcelona femenino primero como responsable de gestión deportiva, ascendiendo a director deportivo dos temporadas después. Durante seis exitosas temporadas, elevó al equipo a la élite europea, colaborando con entrenadores como Xavi Llorens, Fran Sánchez y Lluís Cortés. A pesar de la derrota en la final de la Champions en 2019, Zubizarreta redefinió el equipo, fichando talentos como Lieke Martens, Mapi León, Kheira Hamraoui, Asisat Oshoala, y Caroline Graham Hansen. Su astuta estrategia se basó en la gestión de préstamos estratégicos y recuperaciones, destacando el retorno de Jenni Hermoso en 2015.
Es el arquitecto de un equipo dominante, con el que ha cosechado cuatro Ligas, dos UEFA Women’s Champions League (2021 y 2023), cuatro Copas de la Reina, tres Supercopas, y tres Copas Cataluña. A pesar de estos tantísimos logros, acordó su desvinculación con el club en septiembre. Tenía contrato hasta el 30 de junio de 2024, y todo apuntaba a que su siguiente destino era la RFEF. Su legado deja al Barça femenino en el top europeo, si no mundial, con las dos últimas Balones de Oro entre las filas del equipo y una plantilla envidiada en todo el mundo.
Los retos más próximos de Markel Zubizarreta en la RFEF
Markel Zubizarreta aterriza ahora en una federación que intenta recomponerse del caos surgido por el caso Rubiales, que continúa en los juzgados. Estará a cargo de las actuales campeonas del mundo, entre las que hay muchas caras conocidas de su nuevo director deportivo. El reto más inmediato es la clasificación de la Selección española para los Juegos Olímpicos de París 2024. Es un reto complicado, ya que solo dos equipos europeos –aparte de Francia– lograrán el pase olímpico. Sin embargo, España llega con la clasificación más que encarrilada. Si continúa como hasta ahora, el billete a París está asegurado.
Las de Montse Tomé son las primeras de su grupo en la Nations League, sin conocer la derrota y con cinco puntos por encima de las segundas, las suecas. Italia, con cuatro puntos, y Suiza, con cero, tienen prácticamente perdida la clasificación. Especialmente esta última. Incluso en medio de la tormenta, con pocas horas de sueño y entrenamiento, con la tensión del cónclave de Oliva, las campeonas del mundo fueron capaces de endosarle un 5-0 a Suecia, actual número uno del ranking FIFA.
Ahora, España está a punto de concentrarse de nuevo para sus dos últimos encuentros del año. Para esta nueva convocatoria, Tomé ha optado por una línea continuista, con el retorno definitivo de Jenni Hermoso. La futbolista, en el punto de mira mediático después de que Luis Rubiales decidiera propinarle un beso, podrá jugar al fin ante a su afición. Italia y Suecia (1 y 5 de diciembre, respectivamente) se medirán ante la líder de grupo en suelo español. Concretamente, en Pontevedra y Málaga. Dos escenarios de excepción para el estreno del nuevo director deportivo. El arquitecto del mejor club español de la historia que, aparte de la clasificación para los JJOO, tiene como objetivo próximo terminar con la cultura tóxica que han venido denunciando las futbolistas desde que estalló el escándalo. No sabemos cuál de los dos retos es más complicado, si el deportivo o el extradeportivo. Lo que está claro es que la era Zubizarreta acaba de arrancar y esa, a priori, debería ser una buena noticia.
