The Coca-Cola Company ha anunciado este lunes la adquisición del 85% que le faltaba de la compañía Bodyarmor, especializada en bebidas para deportistas, por 5.600 millones de dólares (4.800 millones de euros).
A través de un comunicado, la multinacional ha señalado que en 2018 ya se hizo con una participación del 15% en Bodyarmor, por lo que con esta nueva adquisición del 85% pasa a controlar de forma exclusiva la compañía.
El objetivo de la compra es incrementar la presencia de Coca-Cola en el sector de las bebidas para deportistas. Bodyarmor continuará como un negocio separado dentro de la unidad operativa de Coca-Cola en América del Norte y continuará teniendo su sede en Nueva York.
Además, el director ejecutivo, Mike Repole, y el presidente de Bodyarmor, Brent Hastie, ambos cofundadores de la compañía, continuarán trabajando en la empresa tras la compra.
Bodyarmor continuará siendo distribuido en Estados Unidos por Coca-Cola, una situación que comenzó después de que la multinacional de bebidas entrase en el capital de Bodyarmor en 2015.
Ampliar la cartera de productos
Esta adquisición se enmarca dentro de la estrategia de Coca-Cola por buscar marcas y productos que complemente su cartera de productos y tengan «oportunidades de crecimiento a largo plazo».
Como parte del acuerdo, Mike Repole también colaborará para desarrollar el catálogo de bebidas no carbonatadas de Coca-Cola, incluyendo estrategias de marketing, envasado e innovación en varias de las marcas de la multinacional.