Hace unas semanas era difícil encontrar cubiertos en varias tiendas de Ikea. Este fin de semana el problema eran las encimeras de cocina, los armarios y diferentes accesorios del hogar. La escasez de algunos productos va variando según la semana y la tienda. La cadena sueca se une así a la larga lista de empresas que arrastra problemas de suministros a causa de la situación internacional. Un problema en torno al stock que es generalizado, ya no solo dentro del sector de la distribución sino de toda la industria mundial.
Fuentes de la empresa de muebles aseguran a THE OBJECTIVE que en Ikea los efectos de esta crisis «están siendo mínimos gracias a las diferentes vías de acción emprendidas», sin embargo, basta con acudir a alguno de sus establecimientos para darse cuenta de que la situación está lejos de la normalidad.
«Tenemos un problema muy gordo con Asia y Pacífico y con todo lo que viene de allí, concretamente con encimeras de cocina, no hay casi ningún modelo», explica a este periódico un vendedor de uno de los establecimientos que la cadena tiene a las afueras de Madrid. A pesar de la falta de modelos «los clientes no dejan de comprar», añade este vendedor. «El medidor va a medir la cocina y a la vuelta te dice lo que necesitas comprar acorde a esa medición, el problema es que la mayoría de las veces no está disponible esa encimera elegida, la gente intenta cambiarla por otra de las que sí hay, o espera a tener el modelo que le gusta, pero pueden ser meses porque ahora mismo no comprometemos nada», añade.
A pesar de la situación, el aspecto en tienda y la afluencia de clientes es similar a la de cualquier fin de semana. «Hay problemas en toda la tienda», asegura a este medio otro vendedor, en este caso del establecimiento situado en La Gavia (Madrid). «Faltan estructuras de cama y colchones. Puedes encontrar algunas medidas, pero no todas», explica. Armarios tampoco tienen al 100%, de hecho, están priorizando los de fondo blanco y productos básicos en medidas. Respecto al resto, «como pidas colores oscuros o madera no hay y no saben cuándo van a llegar», aseguran estas mismas fuentes.
«Es muy complicado vender así, estamos vendiendo al día, recomendamos que hagan una lista y pregunten», asegura otra vendedora a THE OBJECTIVE. La respuesta de los trabajadores es generalizada. Intentan ir rotando producto disponible en tienda, pero hay muchas cosas que no vienen y no saben si vendrán en las próximas semanas o meses. O nunca.
Pandemia y suministros
Desde el comienzo de la pandemia hemos sido testigos de un mayor interés por mejorar nuestra vida en el hogar y la demanda de productos de decoración y confort para la casa han crecido sustancialmente. El sector ha experimentado durante el último año y medio un incremento muy abultado de sus ventas que ahora parece estar volviendo a una senda de normalidad, según fuentes del sector del retail consultadas por este medio.
Al tiempo que fue aumentando la demanda en el sector del hogar durante 2020 también fueron creciendo los precios, fruto de un incremento abultado del coste de la madera durante el año pasado. Estos precios se han reducido ligeramente pero siguen por encima de los niveles precrisis. A esta situación hay que unir ahora el disparado precio de envío de los contenedores desde Asia a Europa. Los fletes han pasado de 2.000 euros a cerca de 14.000, según adelantó THE OBJECTIVE.
«Nos enfrentamos a interrupciones en la cadena de suministro de toda la industria que también afectan a la cadena de valor de Ikea. Para poder ofrecer a nuestros clientes una experiencia Ikea a la altura, trabajamos continuamente para mejorar la disponibilidad de nuestros productos», aseguran fuentes de la compañía a THE OBJECTIVE.
Dada la continua volatilidad y las limitaciones de la cadena de suministro, en Ikea están centrados, por un lado, en asegurar la disponibilidad de sus productos más vendidos y, por otro, «en garantizar que los productos más relevantes de la temporada o momentos especiales en el año estén disponibles para nuestros clientes, tanto en tiendas físicas como en la compra online», según aseguran fuentes de la compañía. «También estamos explorando oportunidades para aumentar nuestra oferta de productos procedentes de Europa. La oferta global de Ikea sigue siendo la misma, pero la disponibilidad de nuestros productos puede variar entre los distintos mercados e incluso entre las distintas tiendas de un mismo país», explican estas mismas fuentes.
En este momento, el 70% de su producción viene de Europa y una mínima parte, aseguran desde Ikea, de Asia. Dentro de esta mínima parte se encuentran básicamente los accesorios. Por ello están centrados en reforzar su colaboración con proveedores europeos. Pero lo cierto es que muchas fábricas europeas tampoco se encuentran al 100% debido, precisamente, a la crisis de suministros, lo que está también provocando problemas también en las entregas. Un círculo vicioso que desde el sector retail creen que no acabará hasta dentro de unos meses.