La ofensiva de KKR en TIM vuelve a agitar el fantasma de una opa en Telefónica
La posible compra de Telecom Italia obliga a Pallete a tomar una postura en relación a la oleada de integraciones que pueden producirse en el sector
La opa del fondo de inversión KKR sobre la italiana Telecom Italia (TIM) ha generado un terremoto en el sector telco y un pequeño sismo en Telefónica. La posible compra del incumbente italiano ha abierto la puerta a que se flexibilice la regulación europea y a una oleada de fusiones y adquisiciones, de las que la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete no puede ser un mero observador, según apuntan fuentes del sector y del mercado consultadas por THE OBJECTIVE.
De hecho, los analistas consultados por este diario no dudan en calificar a Telefónica como una de las empresas que podrían ser protagonistas de esta oleada de movimientos corporativos transfronterizos. La duda es saber de qué lado estará la compañía española: si como parte activa, buscando alianzas y oportunidades como en el pasado; o bien de manera pasiva, como parte de una gran compra europea.
De momento, el mercado parece bendecir una operación de estas características en la telco española. Sus acciones subieron más de un 6,3% en la sesión de este lunes, su mayor alza en meses y la mayor de Europa solo por debajo del subidón del 30% de TIM. Nunca unos resultados, ni una operación propia de la compañía española habían tenido un impacto tan positivo en su cotización desde la venta de las torres a Telxius en enero.
Con todo, lo cierto es que el carácter de la arremetida de KKR contra TIM ha vuelto a agitar viejos fantasmas de operaciones para hacerse con la compañía española. Hace exactamente tres años el también fondo estadounidense, Elliot, puso sus ojos en Telefónica, aunque la operación finalmente no cuajó porque los gestores lograron frenar la arremetida incluso antes de que se presentara formalmente.
Durante estos últimos tres años, también ha sido recurrente el rumor de que Deutsche Telekom, la principal operadora alemana, tiene interés con hacerse con la mayoría de la compañía española. Sus sinergias en Alemania y la posición privilegiada de Telefónica en Reino Unido y España serían un buen trampolín para que los alemanes se conviertan en la mayor telco del continente.
Cortafuegos de Telefónica
No obstante, desde la operadora se apresuran en diferenciar la situación en Italia y la realidad de Telefónica «No hay ninguna similitud entre esta opa y un eventual movimiento en Telefónica», insisten. La semana pasada el CEO de la operadora, Ángel Vila, reconoció en la reunión anual TMT de Morgan Stanley que la fusiones eran necesarias, pero advirtió que Telefónica no tenía ningún plan en marcha y que, por el momento, solo actuaría como facilitador.
En cualquier caso, otras fuentes apuntan que la actual hoja de ruta de la compañía es propicia para una eventual operación de estas características. «En los últimos meses Telefónica se ha volcado en reducir deuda y su perímetro, una operación de saneamiento que la convierte en una compañía muy atractiva para una eventual compra», dice un exdirectivo del sector consultado por este diario.
Pero, ¿sería posible una opa en Telefónica en estos momentos? Las fuentes consultadas indican que antes de pensar en una operación de estas características, hay que tener en cuenta que la operadora tiene todavía dos cortafuegos para evitar un movimiento de este calado.
El primero es la acción de oro del Gobierno español que puede vetar opas, al menos hasta diciembre para empresas europeas y sine die para extracomunitarios. Para nadie es un misterio la buena relación de Telefónica con Pedro Sánchez, lo que sería una garantía de que se pudiese frenar cualquier opa hostil o no deseada.
El segundo cortafuegos sería el propio Consejo de Administración de Telefónica, donde BBVA y Caixabank atesoran casi el 12% de la compañía. El apoyo de estas dos empresas españolas podría ser clave para frenar o impulsar una operación de este calado. Hasta ahora, y el caso de Elliot fue un buen ejemplo, han protegido al actual equipo gestor encabezado por José María Álvarez-Pallete.
Dudas del sector con KKR
En cualquier caso, la irrupción de KKR a Telecom Italia ha generado preocupación entre los operadores industriales. Muchos de ellos consideran que sus proyectos siempre pasan por maximizar los beneficios, reducir costes, soltar lastre y vender activos para llevar al máximo el valor de la compañía para los accionistas.
Es verdad que el sector quiere integraciones, pero prefieren que se produzcan entre inversores industriales que con fondos de inversión que, a priori, buscan rentabilidad en el corto plazo de sus adquisiciones.
«Sorprende que la regulación europea permita la entrada de fondos como KKR en infraestructuras críticas y pone problemas para que se estudien posibles movimientos corporativos entre operadoras», dice un directivo de una telco que opera en España.
De hecho, una de las situaciones que mas preocupa es el hecho de que TIM sea el incumbente en Italia y el heredero del monopolio estatal. Es decir, de aprobarse la operación, Telecom sería la primera telco de bandera en manos de un fondo de inversión, que además es estadounidense y no europeo.