Telefónica y Dazn se quedan con los derechos del fútbol español por 4.950 millones

Telefónica España se ha vuelto a quedar con los derechos de La Liga española de fútbol, en esta oportunidad compartiéndolos con Dazn por 4.950 millones de euros para las próximas cinco temporadas, 990 al año. La operadora se quedó con los derechos del mercado residencial hace tres años por 3.064 millones, aunque por tres cursos.

Telefónica se ha quedado con cinco partidos por temporada y tres jornadas completas, mientras que Dazn se ha quedado con otros cinco partidos por jornada. Los acuerdos de colaboración de las dos plataformas abren la puerta a que compartan sus derechos y los emitan en conjunto.

En términos netos, las dos compañías comparten el coste casi de manera equivalente: 520 millones al año para los españoles (2.600 millones por todo el ciclo) y 470 para Dazn (un total de 2.350).

Después de la apertura de sobres realizada al mediodía, el órgano de control de TV de La Liga decidió a última hora de este lunes que la operadora de telecomunicaciones y Dazn han presentado la oferta más atractiva, imponiéndose a otras plataformas internacionales como Relevent y a la española Mediapro.

Telefónica y Dazn serán dueños del fútbol español hasta mediados del año 2027 y –gracias a las nuevas condiciones impuestas por La Liga– podrán explotarlo en propiedad, sacar a subasta su canal de televisión o ceder sus derechos a otras plataformas.

Telefónica se ha visto obligada a presentar dos ofertas, una por tres años y otra por cinco. Y La Liga ha preferido la segunda para cumplir con su objetivo de cerrar un contrato a largo plazo, su gran baza para esta puja. Esto supone además que por segundo tender consecutivo no se ha materializado el interés de grandes operadores internacionales como Amazon por el fútbol español.

Respecto a las limitaciones que tendría Telefónica para presentar una oferta de cinco años -ya que la CNMC solo les permite presentar propuestas a tres años al ser el operador incumbente- las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE indican que Competencia no tendría ningún poder de veto, porque la oferta de la operadora no ha sido una iniciativa propia, sino que se ha limitado a competir ante a las condiciones impuestas por La Liga.

En el caso de Telefónica, esta oferta mantiene su hoja de ruta y objetivo de pagar 1.000 millones de euros por temporada, el mismo montante que llevan abonando durante los últimos tres cursos. La operadora llevaba varios meses advirtiendo de que era imposible pagar más por el fútbol en el actual contexto de deflación del sector de telecomunicaciones.

Opciones de Telefónica

En la compañía eran conscientes de que era difícil elevar la factura del fútbol, por lo que han frenado el coste en un horizonte de cinco años, al tiempo que se espera una importante revalorización del campeonato español cuando finalice este ciclo. De esta manera, Telefónica refuerza su apuesta por el mercado convergente y con el campeonato español como uno de sus contenidos estrella.

Respecto del futuro de la distribución del fútbol, todo indica que se mantendrá como hasta el momento. Esto es la emisión de un canal, Movistar La Liga, que deberá ser ofrecido en el mercado mayorista para que otras plataformas puedan emitirlo.

Esto supone además mantener las actuales reglas establecidas por la CNMC que pasan por el pago por cada abonado de televisión que tenga una operadora, una fórmula históricamente criticada y que en el regulador podrían replantear de cara a las próximas temporadas.

Con todo, los planes de Javier Tebas de poner una alfombra roja a un operador internacional como Amazon o Disney+ (ESPN) han vuelto a fracasar. Incluso llegó a plantear la posibilidad de crear una nueva plataforma neutra en la que estos actores pudiesen compartir sus derechos y facilitar la visualización a los futuros abonados, reduciendo su factura. 

En este sentido, este pasado fin de semana se filtró el supuesto interés de la operadora internacional Relevent por más de 1.000 millones al año. La plataforma que rentabiliza eventos deportivos en Estados Unidos de la mano de ESPN y en México con Televisa habría planteado crear un canal corporativo de La Liga, que posteriormente fuese ofrecido a todas las plataformas de pago como Movistar+, Orange TV o Másmóvil.

2,4 millones de abonados

La reflexión que hacía Tebas antes del tender era que con Telefónica teniendo los derechos en exclusiva era imposible bajar los precios y, por tanto, menos gente podría tener acceso a los partidos de La Liga. La operadora es el gran cliente del fútbol español con una factura que oscila los 1.000 millones de euros cada año.

Sin embargo, si hubiese ganado Relevent, al importante coste de tener que emitir en todas las plataformas se hubiese sumado el gran problema de generar abonados al fútbol en España.

Los cálculos del mercado, y a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, indican que cualquier plataforma o plataformas que tengan el fútbol, tendrían que tener el doble de abonados a La Liga que los que tiene actualmente, si es que Tebas quisiese recaudar al menos los 1.000 millones de euros que paga la operadora por temporada.

En estos momentos, Telefónica tiene dos millones de abonados que tienen contratada La Liga y Orange -que es el único con quien comparte los derechos- tiene otros 400.000 clientes. En total, 2,4 millones de abonados que solo pueden rentabilizar incluyendo el fútbol en sus ofertas convergentes.

Sin embargo, si es que el fútbol se viese a partir de la próxima temporada en una plataforma como Amazon o DAZN, tendría que tener al menos 4,2 millones de abonados para ser mínimamente rentable y justificar el pago anual de 1.000 millones de euros al año, que es lo mínimo que quería recaudar Tebas en esta subasta.

Factura del fútbol

En el sector se considera que el precio máximo que se podría cobrar a un abonado por La Liga está en torno a los 20 euros. Esto supone que cada cuenta pague 240 euros al año. Para ingresar los 1.000 millones referidos anteriormente se deberían tener al menos 4,2 millones de usuarios que paguen este montante, sin promociones. 

Hay que agregar además que a este coste hay que sumarle el pago de una conexión de internet con, al menos, 100 megas de velocidad. Esto significa elevar la factura en otros 20 a 30 euros como mínimo al mes, lo que elevaría el precio final en torno a los 40 y 50 euros, un precio que no parece tan accesible por ver fútbol.