La industria advierte de «peligro de supervivencia» tras pagar por la luz más del doble que en Francia

Las empresas que conforman la Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía (Aege), que suponen más del 10% del consumo eléctrico nacional, cerraron el año pasado con un sobrecoste de suministro que superó los 1.500 millones de euros, más del doble que sus principales competidores europeos.

En concreto, según datos facilitados a THE OBJECTIVE por la patronal, asumieron un precio de unos 120 euros el megavatio hora (MWh), mientras que sus homólogas francesas y alemanas pagaron el MWh a 50 y a 84 euros, respectivamente. Además, Aege señala que, a 20 de enero, los futuros eléctricos de este año se marcan en 180 €/MWh, lo que supone un precio final para los electrointensivos de 190 €/MWh, un 60% por encima de 2021 y un 320% más que en 2020.

«Como se puede deducir de estos lamentables datos de precios eléctricos en España, a las compañías industriales con gran consumo eléctrico les espera a corto plazo seguir soportando unos costes eléctricos que suponen un serio peligro para su supervivencia, al estar muy expuestas al precio del mercado diario —más del 90% de su consumo en 2022—. Y, si la industria básica está en riesgo, la consecuencia evidente es que también lo están sus miles de empleos», aseguran desde la asociación.

Aege recalca que los costes eléctricos suponen el 60% del total del gasto de producción de las empresas del sector, un porcentaje que con los actuales niveles de precios ha ido creciendo hasta llegar a pesar un 75%. Bajo esta coyuntura, denuncia que algunas compañías se han visto obligadas a parar su actividad o a reducir su producción, «una realidad que puede hacer inviable la continuidad de algunas fábricas».

Bajo este contexto, la asociación calcula que el sobrecoste del suministro eléctrico sus compañías asociadas —un total de 26 que facturan más de 20.000 millones de euros al año— fue de 1.500 millones de euros el curso pasado en comparación con lo que pagaron sus principales competidores europeos. Para más inri, estima que la factura crecerá en 2.300 millones en el ejercicio actual.

Imitar los modelos francés y alemán

Las empresas industriales grandes consumidoras de energía se quejan de que las eléctricas no les están ofreciendo contratos de suministro competitivos con los que poder hacer frente a la actual coyuntura. De hecho, abogan por imitar los modelos francés y alemán con contratos bilaterales a largo plazo. En el país galo también hay una tarifa asociada al precio de la nuclear. AcelorMittal, Acerinox, Sidenor, Sener, Ferroatlántica o Tubos Reunidos son algunas de las empresas que están integradas en Aege.

En este sentido, ha instado al Gobierno a que tome posición para que las energéticas «cumplan su compromiso» y a que elimine definitivamente el impuesto a la generación del 7% —suspendido hasta abril—. También ha reclamado que los resupuestos Generales del Estado de 2022 contemplen una partida mínima de 450 millones de euros por compensación del CO2 indirecto.

Nueva modalidad de ERTE

Por otro lado, solicita que se complete el desarrollo del estatuto de consumidores electrointensivos concediéndoles la exención del 80% de los peajes de transporte eléctrico, como sucede en Francia y Alemania. En Portugal también tendrán una rebaja del 94% de sus tarifas de acceso este año. Asimismo, demanda una nueva modalidad de Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) asociada a la situación de los precios energéticos para aquellas empresas cuya producción se vea comprometida.

Según distintas empresas industriales consultadas por este medio, el precio razonable del que tanto se ha hablado en los últimos meses se debería situar entre los 55 y 60 €/MWh, «lo más parecido a los niveles registrados antes de la actual crisis energética, con el gas y los derechos de emisión de CO2 disparados.

El Ejecutivo dijo el año pasado que obligaría a las grandes eléctricas a ofertar electricidad de forma proporcional a su cuota entre las comercializadoras independientes y los grandes consumidores industriales mediante contratos a plazo con un periodo de liquidación igual o superior a un año. Sin embargo, no ha puesto en marcha el calendario de subastas aún. Las empresas alegaron que ya tenían vendida toda su energía en 2021 y casi toda para este curso. En total, Iberdrola, Endesa, Naturgy y EDP deberían haber sacado a puja 15.830 gigavatios (GWh), equivalentes al 6,3% de la demanda eléctrica nacional en 2020.