Vodafone, BBVA, EDP y Mercadona reciben las mayores multas por vulnerar la protección de datos

En 2021, cuatro empresas fueron multadas con más de un millón de euros por vulnerar el reglamento de protección de datos, según ha publicado ahora la Agencia Española de Protección de Datos en el Boletín Oficial del Estado (BOE). 

Esta publicación en el BOE es obligada en el momento en el que las sanciones superen el millón de euros, algo que solo ocurrió en el caso de cinco personas jurídicas.  En concreto, Mercadona, BBVA, Vodafone y dos filiales de EDP, EDP Energía y EDP Comercializadora, suman un total de 18,67 millones de euros en multas por vulnerar varios artículos del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).  

Vodafone recibe la mayor multa 

En marzo de 2021, Vodafone recibió cuatro sanciones que en total sumaban 8,15 millones de euros. Dos de las multas eran por infracción del Reglamento General de Protección de Datos, una por una infracción grave de la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y del Comercio Electrónico y otra por infringir la Ley General de Telecomunicaciones. 

El principal motivo por el que fue multada Vodafone fue por seguir llevando a cabo acciones de mercadotecnia a pesar de que los usuarios habían solicitado en repetidas ocasiones no recibir estas acciones comerciales. 

Además, la Agencia Española de Protección de Datos señalaba que Vodafone ya había sido multada en más de 50 ocasiones, por lo que la gravedad de los hechos era mayor. Destacaba además que en menos de dos años, la empresa recibió 162 reclamaciones por la «gran cantidad de acciones de mercadotecnia mediante llamadas telefónicas». 

Sanción récord para BBVA 

La sanción de la AEPD al BBVA fue en su momento la más alta de la historia de la agencia. Cinco millones de euros divididos en dos multas por no usar los mecanismos adecuados para obtener el consentimiento de los usuarios para tratar sus datos. En concreto, por vulnerar los artículos 6, 13 y 14 del RGPD. 

La agencia reprochó también a la entidad bancaria que empleara términos imprecisos en su política de privacidad, además de que no diera la información adecuada sobre el tipo de datos que se iba a tratar. 

EDP, sancionada por el método de contratación 

También muy elevada fue la multa impuesta a las filiales de la eléctrica portuguesa EDP, dividida en dos de 1,5 millones de euros cada una. Se trata de la multa más alta a una energética por parte de la AEPD. 

Ambas filiales fueron sancionadas por formalizar contratos de suministros sin contar con la documentación que acreditase la voluntad del cliente para llevarlo a cabo o por cambios o altas sin consentimiento. 

En concreto, la agencia acusa a la empresa de no comprobar que los representantes de sus clientes estaban correctamente acreditados para aceptar en su nombre comunicaciones comerciales, además del alta del contrato.

El organismo consideró además que era una infracción grave por tratarse de un hecho continuado en el tiempo.

Mercadona, multada por un proyecto piloto en 48 tiendas

Otra de las grandes multas del año fue la que se impuso a Mercadona por un proyecto piloto que probó en 48 de sus tiendas, según informó la propia empresa. 

El proyecto consistía en un sistema que aplicaba un filtro tecnológico y una verificación visual para identificar a las personas que tenían una orden de alejamiento vigente del establecimiento. Después, se notificaba la presencia de esta persona a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. 

Mercadona explicó que no se guardaba ningún tipo de información de las personas, ya que toda se eliminaba a los 0,3 segundos, lo que aseguran que impedía identificar a aquellas sobre las que no existía una orden de alejamiento. 

Además, desde Mercadona insisten en que la puesta en marcha de esta medida se hizo siempre en contacto con las autoridades correspondientes y compartiendo con la AEPD todos los procedimientos del sistema antes de comenzar. 

Sin embargo, a pesar de defender que todo se hizo de manera correcta, Mercadona pagó la multa sin interponer ningún recurso y obtuvo un descuento por hacerlo de forma voluntaria, por lo que el importe final fue de 2,5 millones de euros.