El S&P 500 cae un 3,87% y Wall Street entra en territorio de mercado bajista
El Dow Jones perdió un 2,79% o 874,73 puntos, hasta los 30.518,06, mientras que el selectivo S&P 500 cedió 150,98 unidades, hasta 3.749,84
Estados Unidos vuelve a mandar malas señales para la economía mundial. La bolsa de Wall Street ha cerrado este lunes con notables pérdidas en todos sus indicadores, especialmente el selectivo S&P 500, que bajó un 3,87% y entró en un mercado bajista por primera vez desde la crisis del coronavirus de 2020, en un momento en que los accionistas están cada vez más preocupados por la inflación en EEUU, la más alta en cuatro décadas.
Según datos provisionales, al término de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones perdió un 2,79% o 874,73 puntos, hasta los 30.518,06, mientras que el selectivo S&P 500 cedió 150,98 unidades, hasta 3.749,84.
Por su parte, el índice compuesto del mercado Nasdaq, que aglutina a las principales tecnológicas, se deslizó un 4,68 % o 530,80 enteros, hasta 10.809,23. Las distintas bolsas de Estados Unidos acarrean pérdidas de en torno al 20% desde el inicio del año, en una situación que preocupa cada vez más a legisladores y empresas porque el conocido como bear market o mercado bajista suele ser el preludio de una recesión.
Según adelanta el New York Times, la situación de la bolsa estadounidense y el alza continua de la inflación en Estados Unidos hacen que sea la Reserva Federal esté discutiendo la posibilidad de hacer su mayor aumento de tasas de interés desde 1994. En concreto, el banco central estadounidense contempla la posibilidad de aumentar las tasas de interés en tres cuartos de punto porcentual el miércoles, cuando esté listo para publicar tanto su decisión como un nuevo conjunto de proyecciones económicas.
Un bear market o mercado bajista es cuando los principales índices bursátiles están experimentando una caída continuada de precio de al menos el 20% durante dos meses. A nivel económico, suele interpretarse como una señal que antecede a una recesión: tanto en la Gran Depresión de 1929 como en la crisis de 2008, hubo bear market. Sin embargo, durante la burbuja tecnológica del año 2000, también se produjo una situación similar que no desembocó en una recesión.
Caídas en Asia y Europa
De hecho, este descenso también está afectando a Asia. Los mercados bursátiles en el continente más poblado del planeta cerraron en rojo, con el índice de referencia Nikkei 225 de Japón cayendo un 3% y el Kospi de Corea del Sur cayendo un 3,5%. En Hong Kong, las acciones cayeron un 3,4%, mientras que el índice de las empresas más grandes de China que cotizan en Hong Kong cayó un 3,6 %. Además, el yen japonés cayó a un mínimo de 24 años frente al dólar estadounidense.
En Europa, el índice Stoxx 600 bajó un 2,4%, alcanzando su nivel más bajo desde principios de 2021. El FTSE 100 de Gran Bretaña cayó un 1,5% después de la noticia de que la economía del país se contrajo inesperadamente en abril, cayendo un 0,3% desde marzo, a pesar de que los economistas esperaban un pequeño aumento en el crecimiento.
Además, los precios de los bonos europeos cayeron bruscamente, ya que los operadores descontaron una serie de aumentos de las tasas de interés por parte del Banco Central Europeo como reacción a la alta inflación en la eurozona. En este sentido, los rendimientos de los bonos del gobierno alemán e italiano, que se mueven inversamente a los precios, alcanzaron máximos de varios años, lo que implica un fuerte aumento en los costos de endeudamiento.
El Ibex se desploma un 2,4%
El Ibex 35 ha encadenado su tercera jornada consecutiva en negativo al caer un 2,47% en la sesión de este lunes, lo que ha ocasionado que bajase hasta los 8.100 puntos, en una semana que estará marcada por la reunión de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos, según informa Europa Press.
El mercado espera una subida de 50 puntos básicos, después de conocerse que la inflación del país norteamericano repuntó de nuevo hasta el 8,6% en mayo y vuelve a situarse en máximos desde 1981. Además, esta semana también se reunirá el Banco de Inglaterra, que podría anunciar nuevos incrementos de tipos.
En cuanto a datos macro, se ha publicado este lunes que el Producto Interior Bruto (PIB) del Reino Unido registró una contracción del 0,3% en abril respecto del mes anterior, cuando la segunda mayor economía europea ya había retrocedido un 0,1%.