THE OBJECTIVE
Economía

Raquel Sánchez fulminó a su 'número dos' por maniobrar y culpar a Renfe del lío de los trenes

La ministra de Transportes hizo dimitir también al presidente del operador ferroviario de España para que no recayese toda la culpa en Adif

Raquel Sánchez fulminó a su ‘número dos’ por maniobrar y culpar a Renfe del lío de los trenes

La ministra de Transportes, Raquel Sánchez. | Europa Press

Las elecciones autonómicas y municipales se acercan. Lo que significa, en clave económica, que cualquier inversión destinada al transporte se vuelve vital en este inminente proceso electoral. En medio, dos comunidades autónomas clave para los socialistas, Cantabria y Asturias, arden desde que se ordenaron por error hasta 31 trenes que no cabían por unos túneles por ser de mayor tamaño.

Un escenario que ha abierto de nuevo las tradicionales rencillas y acusaciones cruzadas entre Renfe y Adif. Sin embargo, esta vez ha sido la ambición política de la que hasta ahora era la número dos de la ministra de Transportes, Isabel Pardo de Vera, la que desató la doble dimisión de este lunes. La ya exsecretaria de Estado -que había sido la máxima responsable de Adif cuando se llevó a cabo el problema con los trenes– en su afán por buscar un acomodo político en Galicia, maniobró por detrás con Asturias para culpar a Renfe de la contratación de las 31 unidades.

La ministra Raquel Sánchez, que conoce bien la política local, sus entresijos y las ambiciones de unos y otros, no lo dudó: su número dos no continuaría en el Ministerio. Lo último que quería a las puertas de las elecciones era un enfrentamiento interno entre las dos gigantes ferroviarios del país y forzó, de esta forma, su dimisión.

Una decisión, esta última, que ha sorprendido a Pardo de Vera, conocida por su carácter versátil, capaz de lograr la confianza de los primeros espadas del Ministerio de Transportes tanto en gobiernos socialistas como conservadores (en concreto, con la exministra de Fomento, Ana Pastor, que la promocionó dentro su ministerio).

Sin embargo, Raquel Sánchez no podía cesar solo a su número dos porque arrojaría a la opinión pública que toda la culpa de la crisis de los trenes recaía en Adif, por el pasado de Pardo de Vera como expresidenta de la compañía pública. Así, la ministra se erigió como árbitro para decidir de una forma salomónica fulminando no solo a su número dos, sino también al presidente de Renfe, Isaías Táboas.

Raquel Sánchez repesca al chivo expiatorio de Maroto

Raül Blanco, que hasta hace unos pocos meses era el secretario general de Industria y Pyme en el Ministerio de Industria, ha sido el rescatado por la ministra Sánchez para nombrarlo como presidente de Renfe. Se trata de un hombre que sirvió de chivo expiatorio para que la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, no se viese salpicada en su carrera por la alcaldía de Madrid por el mal funcionamiento del proyecto estrella de su ministerio: el Perte VEC (Vehículo Eléctrico).

Blanco, que tiene buen historial dentro del partido socialista, alcanza un puesto relevante en una compañía clave. Su sacrificio, por lo tanto, no queda en vano. Por otro lado, David Lucas, anterior secretario general de Vivienda, ha sido promocionado como nuevo secretario de Estado de Transportes, sustituyendo así a Isabel Pardo de Vera.

Por otro lado, los dos presidentes autonómicos afectados no han parado de presionar hasta que se han depurado responsabilidades. El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha criticado no solo que la adjudicación se hiciera «sin medir los trenes ni los túneles», sino que «durante dos años y pico lo sabían y no han dicho nada». El presidente de Asturias, Adrián Barbón, ha calificado la situación de «un escándalo que no admite otro calificativo que bochorno y vergüenza». Ambos dirigentes autonómicos habían pedido a la ministra de Transportes que se depurasen responsabilidades.

Por otro lado, Barbón detalló que el Gobierno central transferirá recursos al Ejecutivo asturiano y cántabro para bonificar los servicios de Renfe y cercanías hasta el momento en el que se entreguen todos los trenes comprometidos, con independencia de que los que se vayan construyendo puedan ir llegando a estos territorios. Pese a que en un primer momento la ministra había explicado que esas partidas presupuestarias podrían ir a bonificar los servicios de cercanías, el presidente asturiano ha precisado que también irá para los servicios de Renfe.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D