La reforma de pensiones elevará la prestación media un 38% en 12 años y el gasto se duplicará
La nómina de las pensiones se disparará hasta 313.400 millones de euros en 2035 y el 16,9% de las prestaciones serán máximas, frente al 12,3% actual
José Luis Escrivá ha impulsado una reforma de las pensiones en la que aumenta considerablemente los gastos. | Europa Press
La reforma de las pensiones impulsada por el Gobierno con el aval de los sindicatos y de la izquierda parlamentaria y sin objeciones por parte de Bruselas no logrará frenar el gasto, como ya han advertido analistas y expertos del ámbito público y de privado. De hecho, según las proyecciones que maneja la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), la nómina destinada a pagar la prestaciones públicas deberá casi duplicarse en 12 años, para afrontar la entrada de nuevos beneficiarios y los incrementos de las prestaciones.
Según las proyecciones del organismo independiente, que dirigió el actual ministro de la Seguridad Social, José Luis Escrivá, durante cuatro años, serán necesarios 313.400 millones de euros para pagar 13,6 millones de prestaciones -viudedad, jubilación, incapacidad..-, muchas de ellas de la numerosa generación del baby boom que ya ha comenzado a desembarcar en el sistema.
Las estimaciones de la AIReF, a partir de un escenario central neutro, señala que la pensión media pasará de los 1.200 euros mensuales -en 14 pagas- actuales a 1.646 euros en 2035 -un 38%- y a más de 2.300 en 2050. Junto a esto, el porcentaje de pensionistas que recibirán la prestación máxima pasará del 12,3% al 16,9% en 2035.
Una reforma de pensiones insuficiente
Mientras, los ingresos crecerán 0,4 puntos, gracias al Mecanismo de Equidad Intergeneracional; medio punto por la reforma de cotizaciones de los trabajadores autónomos; 0,4 puntos por la evolución de las bases máximas de cotización; y un 0,1% por la tasa de solidaridad. En total, 1,3 puntos más de ingresos. En este contexto, según destaca la AIReF, el déficit que elevará en 1,1 puntos de Producto Interior Bruto (PIB) hasta 2050.
Ciudadanos adelantó el pasado octubre que, a partir del 1 de enero de 2035, todo lo que se recaude por las rentas del trabajo -cotizaciones, IRPF- irá a parar directa y exclusivamente a pagar las pensiones. Desde esta formación se ha alertado de que la sistema público de pensiones no es viable a largo plazo y que los jóvenes serán los que tengan que afrontar las consecuencias.
La reforma, al Congreso
El Congreso de los Diputados convalidará el próximo jueves el decreto ley que incluye la reforma de las pensiones, que según ha prometido el Gobierno se tramitará después como proyecto de ley para poder introducir enmiendas de los distintos grupos, tal y como deslizó el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, en la Comisión del Pacto de Toledo.
En una reunión extraordinaria, el Consejo de Ministros aprobó el pasado 16 de marzo la segunda base de la reforma del sistema de pensiones, que contempla subidas de bases máximas y de cotizaciones, mejoras en las pensiones mínimas y el establecimiento de un modelo dual para calcular la pensión, que dará opción a elegir entre los últimos 25 años cotizados o 29 años, descartando en este último caso los dos peores.
La reforma, acordada en el seno del Gobierno de coalición con la Comisión Europea primero, y con los sindicatos después (sin incluir a la patronal), se aprobó finalmente como real decreto ley para así agilizar su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
El nuevo sistema que propone Escrivá implicará un «sustancial» aumento de la pensión, en buena medida por la progresiva subida de la sobrecotización que establece el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que pasará del 0,6% actual al 1,2% en 2029. De hecho, el ministro apuntó que la reforma supondrá un incremento de casi 20.000 euros en la futura jubilación de los trabajadores de 25 años y de casi 5.000 euros en empleados que se jubilen en 2027.
