Alerta en la UE: no hay dinero para pagar los intereses del préstamo para salir de la crisis
Los tipos y la inflación han disparado los costes de financiación. Urge una revisión de las finanzas y corren peligro partidas prioritarias
La subida de los costes del préstamo del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, diseñado para combatir la crisis, debido al incremento de los tipos de interés y de la inflación ha puesto en alerta a la Unión Europea. Diversos informes y análisis internos ya contemplan la gravedad del asunto y apuntan que no habrá recursos para pagar una deuda que se ha disparado. El Presupuesto comunitario de 2024 corre peligro, al igual que algunas partidas prioritarias, según estiman los eurodiputados que conforman la Comisión de Presupuestos.
Si no se toman medidas, «es probable que los crecientes costes de endeudamiento por el Plan de Recuperación limiten seriamente la capacidad del presupuesto de la UE para financiar las prioridades y políticas de la Unión y responder a las necesidades emergentes». Es lo que afirma uno de los informes al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. Este será debatido en el Pleno de hoy lunes -8 de mayo- y se votará dos días después.
La subida de la inflación y de los tipos de interés están detrás de esta situación, que hace necesario, según admiten los eurodiputados, «una reforma urgente de las finanzas de la UE«. El marco financiero plurianual (MFP) 2021-2027 programó 12.900 millones euros a precios de 2018 -15.000 millones a precios corrientes- durante siete años para cubrir los costes de endeudamiento de Plan de Recuperación. La cifra se basó en el supuesto de que los tipos de interés de los préstamos aumentaran gradualmente del 0,55% en 2021 al 1,15 % en 2027.
Acción urgente para afrontar el préstamo
Los eurodiputados responsables del informe, cuyo ponente es el belga Johan Van Overtveldt, del Grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos, señalan que la invasión de Ucrania ha acelerado la inflación. Esto ha provocado, destacan, una respuesta contrainflacionaria del Banco Central Europeo y «el correspondiente aumento sustancial de los tipos de interés», que se sitúan en el 3,75%, su nivel más alto desde octubre de 2008.
Los europarlamentarios advierten que sin una reacción rápida a través de la revisión del MFP «es probable que el aumento de los costes de reembolso del Instrumento de Recuperación de la Unión Europea supere los márgenes disponibles en el presupuesto». «Se requiere una acción urgente para evitar una situación que obligue el uso de la mayoría, si no todos, de los recursos disponibles en virtud del Instrumento de Flexibilidad y el Instrumento de Margen Único en 2023 y 2024», alertan.
Por último, hace hincapié en que la falta de acción no solo reduciría la capacidad de la Unión para responder a las necesidades y crisis emergentes, tanto dentro como fuera de la Unión, sino que también haría prácticamente imposible financiar nuevas iniciativas importantes, como la ley europea de chips propuesta, sin recortar programas o fondos esenciales existentes.
Más recursos
En otra resolución, que también será debatida hoy y votada el miércoles, los eurodiputados evalúan los ingresos de la UE y abogan por la introducción de nuevos «recursos propios». El informe de la Comisión de Presupuestos, cuyos ponentes han sido el portugués José Manuel Fernandes y la francesa Valérie Hayer, muestra la preocupación de que las cantidades generadas por los nuevos recursos propios no sean suficientes para cubrir todos los pagos derivados del Plan de Recuperación y de los préstamos del plan Next Generation EU.
La Unión Europea ya ha impulsado tres recursos especiales para afrontar la deuda generada por los fondos de recuperación Next Genaration. Estos tres nuevos recursos propios son los ingresos procedentes del comercio de derechos de emisión (ETS), los recursos generados por la propuesta del mecanismo de ajuste en la frontera del carbono de la UE (CBAM) y los ingresos relacionados con el impuestos de sociedades de las multinacionales.
La Comisión Europea espera recaudar hasta 17.000 millones de euros al año en precios de 2018 mediante los tres nuevos recursos propios para financiar el presupuesto comunitario entre 2026 y 2030. Sin embargo, el aumento de los tipos hace inevitable buscar otros ingresos para afrontar programas prioritarios.