Las exportaciones acumulan ya cinco meses de caídas y anticipan el frenazo de la economía
En agosto se produjo el menor volumen del año para los envíos al exterior realizados por las empresas españolas
Las exportaciones han dejado de ser la joya de la corona de la economía española. Los datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo publicados este jueves y cribados por THE OBJECTIVE indican que los envíos al exterior cayeron un 10% en el mes de agosto (el último registrado), el mayor desplome en lo que va de año y que suma cinco meses consecutivos de retrocesos. Una coyuntura que anticipa el frenazo del tejido productivo en la segunda parte de este 2023 y que ha activado todas las alarmas en el Gobierno.
Las cifras de la Secretaría de Estado de Comercio marcan una preocupante tendencia que comenzó en abril y que se ha acentuado a partir del tercer trimestre. Este mes cayeron un 6,3% en comparación a igual periodo del año anterior, para bajar un 3,1% en mayo, un 2,8% en junio, un 5% en julio y un preocupante 10% en agosto.
En términos anualizados ya se revirtió el explosivo comienzo de año en el que se marcó un 14,6% de crecimiento en el primer trimestre, por lo que (tras un desplome del 4% en el segundo trimestre) la mejora en todo lo que va de este 2023 apenas se queda en el 1,8%. En total, en los primeros ocho meses del año se han exportado mercancías por valor de 256.570 millones, el 37,2% de los envíos con destino a la Unión Europea y el 79,9% hacia países de la OCDE.
Exportaciones por países
Agosto también fue el mes en el que se produjo el menor volumen de exportaciones desde enero, con solo 26.173,7 millones. El dato solo es comparable a los 29.342 millones de abril y es el segundo mes en el que los envíos mensuales bajan de los 30.000 millones. Nuestro mayor comprador fue Francia con 3.814 millones, seguido de Alemania con 2.696,9 millones y Portugal con 2.380,5 millones.
Si se compara con otros años, este mes de agosto es además el que ha experimentado la peor caída en una década. Solo se registraron retrocesos en el año 2014, 2019 y 2020 y el contraste con el periodo más reciente es muy preocupante. En el segundo mes del verano de 2021 se creció un 24,3% interanual y en 2022 se mejoró un 31,7%.
Por zonas geográficas, las exportaciones con destino a la Unión Europea cayeron un 9,3% en agosto, con un desplome del 10,8% hacia Francia y del 36,8% a Países Bajos. Otros fuertes retrocesos se produjeron en Canadá (-25,2%), Brasil (-22,3%), China (-26,4%), Japón (-23,6%), Argelia (-34,7%), Nigeria (-24,7%) y Arabia Saudí (-62%).
Productos afectados
En los primeros ocho meses del año, las exportaciones de España cayeron fundamentalmente hacia Asia y a África, un 7,1% y un 7,8%, respectivamente. Por países, destaca la bajada del 20,4% en Países Bajos, un 37% a Rusia, un 11,3% a Canadá, un 15,9% a Corea del Sur y un 11,3% a Japón. Estos retrocesos se suman a un 3% de caída a China (el mayor destino por volumen con 4.967 millones) y a los desplomes de Argelia, del 85,4%, y del 19,4% en Arabia Saudí.
Por productos, los desplomes se producen generalmente en productos energéticos con un 35,6%, materias primas (-31,7%), semimanufacturas no químicas (-15,8%) y bienes de consumo duradero (-15,7%). Y en lo que va de año estos retrocesos se suavizan hasta el -22% en productos energéticos (-20% en petróleo y -38% en carbón); un -19% en hierro y acero; un -16% en plástico y el -6,3% en textiles.
Un peligroso cóctel que preocupa mucho en el Gobierno. La caída es generalizada y constante en todos los sectores y en todos los países, en especial hacia mercados clave como China, donde se mantienen las cifras anualizadas en positivo, pero con caídas acumuladas en el último trimestre. China se había erigido como el principal socio comercial de España en 2022. Es verdad que el parón del comercio internacional tras la fiebre por hacer acopio de todo tipo de productos tras la guerra de Ucrania ha afectado a todos los países, pero comparativamente España ha sido mucho más perjudicada.
Frenazo del PIB
El gran problema es que hasta la fecha las exportaciones habían sido el principal motor del crecimiento español junto con las inversiones. Durante el año 2022, el PIB se elevó hasta el 5,8% con las exportaciones por encima de los 389.000 millones de euros. Un crecimiento de cerca del 23% interanual respecto a 2021 que apuntaló otras variables más inestables como el consumo interno o la presión de los precios de la energía sobre la producción.
Sin embargo, en la primera parte del año ya se ha comenzado a notar el impacto de este retroceso en las exportaciones. Mientras que entre enero y marzo el crecimiento el PIB fue del 0,6% (con las exportaciones creciendo un 14,6%), entre abril y junio el crecimiento total fue del 0,5% (con una caída cercana al 4% de los envíos al exterior de mercancías.).
Exportaciones y crecimiento
En este sentido, los expertos consultados por este diario indican que la caída de las exportaciones que se acumulan desde el mes de abril terminarán impactando en la tasa de crecimiento del PIB y anticipan un frenazo en su crecimiento. Las previsiones de todos los organismos internacionales -y del propio Gobierno- sitúan esta mejora sobre el 2% este año, lo que supone crecer una media del 0,5% en los dos trimestres que quedan para cerrar el año, aunque se estima que el crecimiento del tercer trimestre será inferior al de los últimos tres meses de 2023.
En cualquier caso, lo que parece seguro es que estas caídas en las exportaciones terminarán por impactar en los datos de crecimiento del próximo año, donde ya se han rebajado las previsiones iniciales de mejora del PIB. El último en sumarse ha sido Funcas, que ha rebajado el crecimiento de la economía española al 1,5% en 2024, al mismo tiempo que estima que el PIB crecerá apenas un 0,1% en el tercer trimestre de este año.