Una firma irlandesa abre 'bancos' de cajas fuertes en España ante la creciente inseguridad
Tras llegar a Barcelona, The Vaults Group invierte 13 millones de euros en Madrid y otras cinco ciudades españolas
Seamus Fahy, director general de The Vaults Group, en su centro de alta seguridad en Barcelona | Cedida
Una empresa irlandesa especializada en instalaciones de alta seguridad apuesta por España ante el aumento de los índices de criminalidad en algunas ciudades. También el cierre masivo de sucursales de entidades bancarias, que tradicionalmente ofrecían el servicio de custodiar bienes de valor en sus cajas fuertes, ha generado la necesidad de una nueva oferta ante la creciente demanda para alquilar un espacio seguro donde guardar joyas o documentos importantes.
«Abrimos nuestro primer centro en Irlanda en 2013 y luego nos expandimos por todo Reino Unido, donde ahora tenemos nueve centros además de los dos de Irlanda», explica Seamus Fahy, director general de The Vaults Group, que ya ha aterrizado en España con su primera apertura en Barcelona. «Nuestras siguientes instalaciones las abriremos de aquí unos meses en Madrid, en el barrio de Salamanca, y también estamos buscando propiedades en Valencia, Sevilla, Málaga, Marbella y quizá Bilbao», señala el empresario irlandés a THE OBJECTIVE.
Se trata de centros de alta seguridad a los que, como si de una película de espías se tratara, el cliente solo puede acceder con cita previa y un escaneo de su iris. Una vez dentro, hay una recepción con trabajadores protegidos por un cristal blindado y, ya en la cámara de seguridad, cientos de compartimentos de diferentes tamaños, que se alquilan para guardar objetos de valor, vigilados con cámaras que ven en tiempo real los trabajadores de la compañía desde las otras instalaciones. En caso de incidente, pulsan un botón del pánico que alerta a un proveedor privado de seguridad y a la policía.
Inversión millonaria
Es un modelo de negocio rentable, y el grupo anglosajón tiene preparada una inversión de tres millones de euros para abrir el centro de Madrid, que dará trabajo inicialmente a diez personas ampliables a 20. Posteriormente, invertirá un capital de diez millones de euros para expandirse al resto de ciudades de España, país por el que ha apostado porque es uno de los puntos del mundo que registraba mayores listas de espera en las webs de la empresa.
«Todos los bancos están cerrando sus sucursales y el BBVA está intentando comprar Sabadell; si eso ocurre, la nueva compañía cerrará muchas oficinas», subraya Fahy, que ve un interés por guardar artículos de valor económico o sentimental como oro joyas, colecciones, dinero, metales preciosos, broches familiares, escrituras o títulos de propiedad mientras es cada vez más difícil encontrar este servicio en una entidad financiera cercana. Por otro lado, The Vaults también vende lingotes de oro a sus clientes, la mayoría de los cuales decide guardarlo en las cajas de la misma empresa.
Expansión a Estados Unidos
El siguiente paso en los planes de Fahy es abrir su primer centro de cajas fuertes en Estados Unidos. La primera ubicación será Tejas, donde se ha detectado una fuerte demanda. Y es que, según explica el empresario, «en Tejas vive una gran población asiática de pakistanís, indios y algunos chinos, todos ellos tienen oros porque las chicas asiáticas, cuando se casan, llevan puesto mucho oro que pasa de generación en generación, de madre a hija, y necesitan un lugar seguro para guardarlo».
De hecho, en Barcelona, donde también existe una comunidad pakistaní significativa, algunos ciudadanos de esta nacionalidad ya han empezado a alquilar cajas fuertes en las instalaciones de la firma en el casco antiguo de la ciudad. Este centro abarca 350 metros cuadrados y cuenta con entre 4.000 y 5.000 cajas. La más pequeña, la más exitosa pues es la que contrata la mitad de la clientela, tiene un precio anual de 400 euros.
Los bancos pierden presencia
La multinacional irlandesa ha trabajado con el asesoramiento de Eduard Zamora, exdirector de Seguridad Corporativa de Banco Sabadell y consultor en seguridad. «La banca siempre ha restringido mucho este tipo de servicios para clientes preferentes, es un servicio de alto riesgo y no todos los bancos lo ofrecen, se ofrece en una mínima parte de las oficinas», indica Zamora, añadiendo que solo se suele tener esta deferencia con clientes VIP y empresas porque no interesa que mucha gente conozca los detalles de seguridad de la cámara acorazada.
«Los índices de robo se han incrementado en los últimos años, Barcelona es un claro ejemplo, pero en otros sitios de España ha ocurrido igual», alerta el consultor. Ante esta situación, son cada vez más los que contratan este servicio, si bien «la demanda ha existido siempre». La tecnología de seguridad va mejorando «igual que para los delincuentes, sus modus operandi cada vez se sofistican más», aunque en los centros de The Vaults «el 75% es resistencia física para ganar tiempo para que se pueda enviar a la policía y a vigilantes».
El holding irlandés también ha colaborado con Ferrimax, sociedad española que ha participado en proyectos de cámaras acorazadas en lugares como Mónaco, Guayana Francesa o en los «auténticos museos» que son las fábricas de Cartier o Patek Philippe en Suiza, así como las puertas de las centrales nucleares en Francia. Su director general, Antonio de la Casa, destaca el aumento de robos en domicilios en España: «El sector residencial para nosotros supone aproximadamente un 12% de nuestra facturación y en estas zonas los productos más demandados son las cajas fuertes, las puertas blindadas y en los chalets las habitaciones del pánico», apunta. «La seguridad física está por desgracia a día de hoy muy poco presente en los diseños arquitectónicos y solamente se pone en valor en situaciones de riesgo», lamenta.
