El coste de financiar los fármacos contra la obesidad: una factura imparable para el Estado
Novo Nordisk y Lilly se encuentran «en conversaciones» con Sanidad para que sus medicamentos sean subvencionados
Novo Nordisk y Lilly se encuentran «en conversaciones» con el Ministerio de Sanidad para que el Sistema Nacional de Salud financie sus medicamentos contra la obesidad (Wegovy y Mounjaro), como ya contamos en THE OBJECTIVE hace apenas unos días. Una decisión nada fácil para el Estado, ya que teniendo en cuenta la alta prevalencia de sobrepeso y obesidad y la población potencialmente apta para el consumo de estos fármacos en España, la financiación de estos medicamentos dispararía el impacto presupuestario. Sin embargo, los estudios han demostrado que, bien usados, son muy eficaces y cubren una importante necesidad desde el punto de vista de la salud pública.
La tasa de obesidad para los adultos españoles es mayor que la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). En España, dos de cada tres hombres tienen sobrepeso y una de cada seis personas tiene obesidad. Además, la OCDE prevé que la proporción de adultos con sobrepeso aumente un 10% más en los próximos 10 años. La prevalencia de sobrepeso estimada en la población adulta española (25–64 años) es del 39,3%; la de obesidad general del 22,8% entre los varones y el 20,5% entre las mujeres, y aumenta con la edad. Así, teniendo en cuenta estos datos, la factura del sobrepeso para las arcas del Estado podría ser bastante abultada, complicando las conversaciones entre laboratorios y Ministerio de Sanidad.
124 medicamentos contra la obesidad, en desarrollo
Además, según los expertos consultados, abrir la vía a su financiación significaría hacerlo también para los nuevos medicamentos que van a llegar en este campo, y que van a ser muchos. «Hay una carrera por desarrollar este tipo de terapias, por ejemplo para conseguir la fórmula de administración oral, o nuevos tratamientos que no reduzcan la masa muscular», apuntan a THE OBJECTIVE fuentes del sector. Según datos de uno de los últimos informes de la consultora Iqvia, los laboratorios tienen en desarrollo activo 124 medicamentos contra la obesidad, el 40% de los cuales son agonistas -en bioquímica, compuestos que incrementan la actividad de otros compuestos- del receptor de glucagón GIP/GLP, una hormona que eleva el nivel de glucosa (un tipo de azúcar) en la sangre y que en los últimos años han ganado popularidad con la aprobación de Wegovy en 2021.
Según el estudio, de los 124 medicamentos en desarrollo, ocho ya están en comercialización, 61 (el 55%) se encuentran en la Fase I de desarrollo y 47, en la Fase II. Según la vía de administración, 63 son de inyección subcutánea, 57 orales, tres intravenosos, dos de vía tópica y uno intranasal.
Tiempo de consumo
Los laboratorios e inversores ya no se preguntan si se puede tratar eficazmente la obesidad con medicamentos. Está demostrado que sí. En promedio, después de un año, las personas que toman medicamentos recetados como parte de un programa de estilo de vida pierden entre un 3% y un 12% más de su peso corporal inicial que las personas en un programa de estilo de vida que no toman medicamentos, según el National Institute of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases.
Ahora, teniendo en cuenta que la obesidad es una enfermedad crónica, la pregunta candente es: ¿durante cuánto tiempo los pacientes podrían tomar estos medicamentos? Una cuestión muy interesante para quienes participan en el precio y el reembolso de estos fármacos, pero para la cual aún no tienen respuesta las farmacéuticas.
Lilly y Novo sostienen que todavía es demasiado pronto para conocer la cantidad máxima de medicamento permitida. Sin embargo, países que pagan las facturas de estos nuevos medicamentos ya están poniendo sus propias restricciones. En Reino Unido, el organismo británico de control sanitario NICE restringe Wegovy a un máximo de dos años, según se desprende del último informe de Evaluate, que también señala que, en EEUU, las limitaciones varían de semanas a años.
El 54% de la población sufrirá sobrepeso y obesidad en 2035
En EEUU, según la consultora, el sistema de salud para pacientes mayores, Medicare, financiado por el gobierno de Estados Unidos, tiene desde hace tiempo prohibido por ley pagar medicamentos solo para bajar de peso. No obstante, Medicare cubre Wegovy y otros fármacos para la obesidad si se aprueban para obtener beneficios de salud adicionales, como para tratar también la diabetes. Recientemente, los resultados del ensayo clínico SELECT, llevado a cabo por Novo Nordisk, que produce y comercializa Wegoby (semaglutida), muestran que una dosis semanal de 2,4 mg de semaglutida reduce en un 20% el riesgo cardiovascular en personas con un índice de masa corporal (IMC) de hasta un 33%. Estos resultados son los últimos en sugerir que estos medicamentos pueden tener amplios beneficios para la salud más allá de su uso tradicional para tratar la diabetes.
Así las cosas, teniendo en cuenta el amplio mercado que contempla este tipo de medicamentos y el alcance que aún puede llegar a tener, no es una decisión fácil para los Estados financiar estos tratamientos. Un reciente estudio publicado en Annals of Internal Medicine determina que 3,6 millones de personas tienen una «alta probabilidad» de recibir semaglutida en EEUU. Si todos estos pacientes recibieran este tratamiento, «el gasto en medicamentos recetados por Medicare podría aumentar entre 34.000 millones y 145.000 millones de dólares cada año».
La obesidad es una importante amenaza para la salud pública a nivel mundial. Las tasas de la enfermedad han aumentado constantemente durante las últimas tres décadas. El Atlas mundial de obesidad 2024 predice que 3.3000 millones de personas en el mundo -el 54% de la población global- sufrirá sobrepeso y obesidad en 2035, frente a los 2.200 millones de 2020 (42%). Para 2025, la cifra será de 2.500 millones (46%) y para 2030, de 2.900 millones (50%).