Un resort exclusivo en Dominicana, el extraño nexo entre Globalia, Rubiales y Cryptospain
El 365 Hotel, propiedad de los Hidalgo, fue refugio del expresidente del RFEF y ahora lo gestiona el chiringuito financiero
El complejo 365 Hotel en playa Bávaro, propiedad de Globalia, ha sido gestionado por el clan Rubiales y ahora por el chiringuito financiero. | THE OBJECTIVE
Un resort exclusivo en República Dominicana unió, en diferentes momentos, los destinos de la familia Hidalgo, Luis Rubiales y los responsables de Cryptospain. El 365 Hotel & Beach Club Punta Cana, un apartahotel de 150 suites y dos grandes piscinas en Playa Bávaro, nunca funcionó, pero ha servido de refugio para el clan Rubiales y, ahora, para los sospechosos de una gran estafa piramidal a partir de inversiones en criptomonedas.
Globalia, el propietario del 365, no consiguió que el Grupo Hyatt se interesase por este singular alojamiento, que nunca funcionó a pleno rendimiento. El consorcio estadounidense sí asumió otros complejos premiun del grupo español. Tras el rechazo de los norteamericanos, el resort, como adelantó THE OBJECTIVE, fue gestionado por el clan Rubiales a través de Israel Dorado. El exgerente de la televisión del Granada FC, empresario en Dominicana y hombre de confianza del expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), empezó a explotar el complejo en 2022.
En febrero de 2024 dejó la gestión, que asumió en marzo Cryptospain, la cara visible de Madeira Invest Club, una sociedad a la que Luis Pérez Fernández, Alvise desvió supuestamente donaciones en criptomonedas de sus simpatizantes. Madeira Invest Club, que ofrecía rentabilidades de hasta el 53%, cesó su actividad en mayo tras la advertencia de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En el comunicado emitido por la CNMV se alertaba de que esta sociedad «no estaba autorizada para realizar las actividades reservadas a las instituciones de inversión colectiva». Posteriormente, cerró su huella en internet y, prácticamente, ha desaparecido.
Acuerdo Globalia-Cryptospain
Preferente, un diario digital especializado en turismo y en el sector hotelero, ha adelantado el cambio de manos de este singular complejo que ha servido como refugio al clan Rubiales y a los responsables de una presunta estafa piramidal. La web señala que el principal responsable de este club financiero, Álvaro Romillo, negoció directamente el acuerdo con el presidente de Globalia, Juan José Hidalgo.
El complejo hotelero, situado en la zona de El Cortecito, está siendo remodelado profundamente por los responsables de Cryptospain. Preferente destaca que el resort estaba en un estado lamentable tras la gestión del clan Rubiales y que, ahora, los empleados del complejo se encuentran preocupados por la situación judicial de los nuevos gestores. También reseñan que el chiringuito de criptomonedas investigado por la CNMV se ha hecho con más propiedades y recintos hoteleros en la isla. Cryptospain ha desviado parte de su negocio a Dominicana.
El refugio del clan Rubiales
Como adelantó THE OBJECTIVE, en los primeros meses de 2024, el clan Rubiales decidió romper su acuerdo con Globalia. El argumento fue el elevado gasto de electricidad que pagaba el complejo hotelero. Las facturas ascendían a 80.000 euros al mes. En el área en el que se ubica el apartahotel opera en régimen de monopolio el Consorcio Energético de Punta Cana (CEPM). Este entidad eleva considerablemente los gastos de luz de los negocios de la zona por ser el único proveedor en el área.
La relación comercial entre la familia Hidalgo y el clan Rubiales se prolongó por espacio de casi dos años. El nexo surgió por la relación de amistad entre Nene y el yerno del presidente de Globalia. El marido de Cristina Hidalgo, Javier Blanco, es «íntimo de Nene», señalaron fuentes dominicanas a este medio. Fue quien propició el inicio de las relaciones entre ambos en República Dominicana. Rubiales, Nene y su presunto testaferro «residían en el mismo apartahotel 365 de manera habitual». Mientras, la mansión que se registró por parte de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil fue «un alquiler en Semana Santa» ante la llegada de sus respectivas familias.
Juan José Hidalgo inauguró en mayo de 2010 Presidential Suites, una nueva marca de apartamentos de lujo integrada en la cadena hotelera Oasis. Uno de los complejos era Presidential Suites Punta Cana, hoy 365 Hotel. Con una inversión de 68 millones de euros, Globalia se convertía en el responsable de comercializar este producto, fundamentalmente, en el mercado estadounidense. La idea era convertirlo en un club de vacaciones de alta gama gracias a su acuerdo con LifeStyle. Esta compañía dominicana, fundada en 2004, estaba especializada en el concepto de «tiempo compartido».
