Montero dejó Andalucía con 7.700 sanitarios menos y recortes del 15% en la partida de salud
Durante su etapa al frente de la Consejería de Sanidad, redujo el presupuesto en 1.496 millones

María Jesús Montero, vicepresidenta primera, ministra de Hacienda y secretaria general del PSOE-A.
María Jesús Montero, vicepresidenta primera, ministra de Hacienda y secretaria general del PSOE-A, asegura que cuando era consejera de Salud «la sanidad era el orgullo de Andalucía». Por ello, promete que «volverá a poner a la sanidad en lo más alto» cuando el PSOE gane allí las elecciones. Algo que, en su opinión, ocurrirá «muy pronto». Y con este augurio no hay día que no martillee con la gestión que Juanma Moreno (PP) está haciendo de la sanidad andaluza, olvidando que durante su mandato al frente del departamento sanitario (2004-2013), el Servicio Andaluz de Salud (SAS) perdió 7.773 sanitarios y recortó hasta un 15% el presupuesto destinado a la sanidad.
Según un informe de la Cámara de Cuentas de Andalucía, durante los últimos años de Montero al frente de la Consejería de Sanidad de la Junta, entre los ejercicios 2011 y 2013, se produjo una disminución del número de efectivos de 7.773 empleados. Los recortes de plantilla afectaron a 1.286 médicos, 1.919 enfermeros, 1.609 administrativos y 1.266 auxiliares de enfermería, «una disminución acumulada» en la plantilla del personal sanitario del 8,2%.
La Cámara de Cuentas, además, detectó por entonces 109 casos de cargos sanitarios con salarios por encima de límites impuestos en el año 2013. En su informe de ‘Fiscalización sobre determinadas áreas de gestión de recursos humanos del sector sanitario público de Andalucía’ correspondiente a ese ejercicio, el órgano de control planteó el reintegro de más de dos millones de euros en retribuciones a más de cien directivos que superaban el límite establecido, todo ello mientras la plantilla del Servicio Andaluz de Salud (SAS) decrecía en 7.773 profesionales entre 2011 y 2013 (un 8,22%). Esto dio lugar por entonces a una gran movilización ciudadana y a la renovación a posteriori de toda la cúpula directiva.
Los recortes en el presupuesto sanitario andaluz fueron especialmente significativos. Según datos de la propia Consejería de Sanidad de la Junta de Andalucía, la asignación comenzó a disminuir en 2008 y mantuvo esa tendencia hasta 2014. En 2008, el presupuesto destinado a sanidad alcanzó los 10.307 millones de euros, pero en 2013 —último año de María Jesús Montero al frente de la Consejería antes de asumir Hacienda (2013 a 2018)— se redujo a 8.811 millones, lo que supone una caída de 1.496 millones, es decir, un recorte del 15%. En comparación, en 2022, últimos datos disponibles, el gasto sanitario ascendió a 13.092 millones. El mayor recorte anual se produjo entre 2010 y 2011, cuando María Jesús Montero recortó 566 millones de euros en un solo año, un recorte de un 5,66%, de los 10.008 millones de 2010 a los 9.442 millones de 2011.
Recorte de las guardias médicas
«María Jesús Montero fue una consejera nefasta», indica el doctor Vicente Matas, coordinador del Centro de Estudios del Sindicato Médico de Granada (CESM), en conversación con THE OBJECTIVE. Matas señala especialmente los recortes aplicados a las retribuciones de los facultativos por las guardias, que situaron a los profesionales andaluces a la cola de España en este ámbito. Según un informe del CESM, en el año 2012, los médicos andaluces cobraban 15,47 euros/hora (bruto) por una guardia laborable, frente a los 26,61 euros/horas de sus colegas murcianos. La media estaba por entonces en 21,84 euros/hora. En la actualidad, con datos de diciembre de 2024, los médicos andaluces cobran 26,94 euros/hora por una guardia laborable.
«Hubo mucha precariedad, contratos por días, por semanas, de lunes a viernes. Ella fue nefasta, pero los posteriores también», aclara Matas, que rememora las grandes manifestaciones que tuvieron lugar en Granada a partir del año 2016 y que fueron lideradas por el médico Jesús Candel, conocido como ‘Spiriman’, contra la decisión de fusionar dos hospitales de la ciudad: el Ruiz de Alda y el Clínico San Cecilio. Además, por entonces, solo el 50% de los médicos internos residentes que acababan su formación en Andalucía se quedaban a trabajar en la comunidad autónoma.
María Jesús Montero fue también la ideóloga de las polémicas subastas de medicamentos en Andalucía, derogadas en diciembre de 2020 por el Gobierno de Juanma Moreno (PP) al darse graves problemas de suministro. En diciembre de 2011, el Gobierno de la Junta de Andalucía, con José Antonio Griñán como presidente y María Jesús Montero como consejera de Salud y responsable de esta iniciativa, aprobó la subasta de medicamentos mediante un decreto ley de Medidas Urgentes en Farmacia. El sistema obligaba a los médicos a prescribir por principio activo y realizaba subastas para seleccionar el medicamento más barato, que debía ser dispensado por las farmacias.
Este modelo generó graves problemas de suministro, ya que algunas empresas ganadoras no pudieron garantizar el abastecimiento. Incluso pequeños empresarios sin experiencia llegaron a adjudicarse contratos importantes, lo que mostró la fragilidad del sistema, relatan a THE OBJECTIVE fuentes del sector. Ahora, este mecanismo vuelve a escena tras la aprobación, este martes, del Anteproyecto de Ley de Medicamentos por parte del Consejo de Ministros —presidido por María Jesús Montero— que recupera el sistema de precios seleccionados, con un funcionamiento similar al de las antiguas subastas andaluzas.