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Economía

Servinabar logró tres obras públicas en Navarra pese a que se dedicaba a «organizar eventos»

Su objeto social en 2015 era “servicios para trabajos administrativos” que nada tienen que ver con la construcción

Servinabar logró tres obras públicas en Navarra pese a que se dedicaba a «organizar eventos»

Santos Cerdán y la presidenta de Navarra, Maria Chivite. | Europa Press

Servinabar, la empresa vinculada a la trama Ábalos y que -según la documentación incautada por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil- habría estado participada en un 45% por el ex secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, obtuvo tres de sus cinco contratos de obra pública con la Comunidad Foral de Navarra sin ni siquiera tener como objeto social la construcción y edificación. Según ha confirmado THE OBJECTIVE con la documentación contenida en el Registro Mercantil, la sociedad operó durante cinco años como gestora administrativa y organizadora de eventos, periodo en el que se adjudicó junto con Acciona licitaciones por valor de 14,6 millones.

Su constitución el 4 de septiembre de 2015 se produjo bajo el objeto social de “servicios para trabajos administrativos como archivos, digitalización y destrucción de documentos, bibliotecas, cobros, encuestas, toma de datos, lectura de contadores, organización de todo tipo de eventos como congresos, ferias y exposiciones, ruedas de prensa, servicios de portería, control de accesos o información al público”. Una actividad que nada tiene que ver con el carácter de los concursos públicos que comenzó a ganar desde entonces.

El último informe de la Guardia Civil -que ya implica directamente a Santos Cerdán- fue el que destapó las vinculaciones de Servinabar con la trama Ábalos. La primera mención que se hace es la explotación minera de potasa entre Navarra y Aragón (Mina Muga) vinculada a la sociedad mercantil Geoalcali, una compañía que contrató los servicios de Acciona en asociación mediante una UTE (Unión Temporal de Empresas) con “otra pequeña mercantil» denominada Servinabar 2000.

Tres obras

La Guardia Civil intenta demostrar que la creación de Servinabar -con vinculaciones societarias entre su dueño, Antxon Alonso, y Koldo García y en la que Santos Cerdán tenía poder de decisión- nació casi exclusivamente para vehicular recursos y participaciones en proyectos vinculados con administraciones públicas. El informe de la Guardia Civil constata pagos de esta empresa al propio Koldo tras constituirse las UTE con Acciona. La sociedad se formó en septiembre de 2015; la UTE con Acciona, en noviembre de ese año, y solo un mes después se firmó el acuerdo de explotación con Geoalcali.

Sin embargo, la sociedad se siguió utilizando para optar a concursos públicos y obras de construcción. En 2017 obtuvo su primer concurso en Navarra. El Gobierno de Uxue Barkos sacó a licitación las obras de acondicionamiento de las oficinas del Navarra Arena, adjudicado a Acciona y Servinabar por 3,8 millones (sin IVA). Ese mismo año se impulsó la rehabilitación del antiguo Archivo General y los jardines de la Diputación y nuevamente ganó la UTE Acciona-Servinabar por 2,4 millones. Obras que duraron casi tres años con un sobrecoste del 19%.

En la tercera adjudicación, que data de diciembre de 2018, Nasuvinsa adjudicó a Acciona y Servinabar las obras de construcción de una promoción de viviendas, la mitad de ellas destinadas al alquiler joven a través del programa Navarra Social Housing. Fueron 8,4 millones con fondos europeos Next Generation. Para entonces, la empresa seguía teniendo como objeto social “la gestión de servicios administrativos y la organización de todo tipo de eventos”. Nada que ver con la construcción de viviendas ni con obras de acondicionamiento y rehabilitaciones, trabajos todos relacionados con otros objetos sociales diferentes.

Objeto social de Servinabar

De hecho, según la documentación a la que ha accedido THE OBJECTIVE, la modificación de objeto social no se hizo hasta el 5 de febrero de 2020, cuando se produjo el cambio hacia la «elaboración y ejecución de toda clase de proyectos de construcción y edificación. Servicios especializados en materia de prevención de riesgos laborales, seguridad y salud, realización de revisiones y actualizaciones de las evaluaciones de riesgos laborales; y otras actividades».

A partir de ahí en sus cuentas anuales (desde la de 2019, pero presentadas a mediados de 2020) ya se incluyen dos objetivos sociales, el de gestión administrativa y organización de eventos y el de “servicios de conservación y mantenimiento de todo tipo de edificios, industrias, carreteras, pistas y calzadas, conservación y mantenimiento de redes de agua, estaciones depuradoras y saneamiento, mobiliario urbano, parques, montes y jardines y limpieza general de edificios”.

14,6 millones en obras

A partir de entonces, ganaron otros dos concursos públicos más. En octubre de 2022, la UTE se adjudicó la construcción en un edificio de vivienda pública para el alquiler en Pamplona, por un valor de 8,4 millones; y en enero de 2024, el Gobierno de Navarra anunció la adjudicación de las obras de desdoblamiento del túnel de Belate por 76 millones a la UTE formada por Acciona, Construcciones Osés y Servinabar. Es, hasta la fecha, el mayor contrato que se ha llevado Servinabar.

Servinabar obtuvo 14,6 millones de euros en tres contratos públicos junto a Acciona como una empresa organizadora de eventos y gestión administrativa, prueba de que estamos ante una compañía presuntamente creada para participar en estos concursos, ya que realmente tiene una escasa actividad operativa y menos constructora, pero se lleva una importante tajada por participar en la obra. Parece que su asociación con el gigante del Ibex era básicamente instrumental e indica que y las sucesivas UTE se constituyeron como requisito para dar entrada a la sociedad navarra relacionada con Koldo y Cerdán.

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