Tu inquilino no paga el alquiler: cuál es el procedimiento para recuperar el dinero y la propiedad
Son muchos los que sufren este percance y no saben ni por dónde empezar a recuperar lo que les pertenece por derecho

Casa | Canva pro
El impago del alquiler es una de las situaciones más conflictivas que puede enfrentar un arrendador. Aunque es frecuente, no por ello deja de generar preocupación y dudas sobre cómo proceder. Según datos del Consejo General del Poder Judicial, en 2024, los desahucios por impago de alquiler representaron el 75% del total, con más de 11.300 casos registrados solo en el primer semestre del año. Estos números reflejan que esta situación, lejos de ser excepcional, es una realidad con la que muchos propietarios deben lidiar, y subrayan la importancia de conocer los pasos a seguir para proteger tanto los derechos como los intereses económicos del arrendador.
¿Cómo hay que actuar ante una situación así?
Ante el impago, el primer paso es contactar al inquilino para intentar resolver la situación de manera amistosa. Mantener un diálogo abierto puede permitir negociar un plan de pagos o buscar soluciones temporales que eviten conflictos mayores. Sin embargo, si esta vía no da resultados, es fundamental contar con el respaldo de un abogado especializado en arrendamientos. El Colegio de la Abogacía de Bizkaia recomienda actuar cuanto antes y buscar asesoramiento legal desde el inicio del problema, porque esto permite tomar decisiones informadas, valorar todas las opciones disponibles y, si es necesario, iniciar los trámites para recuperar la propiedad y reclamar las cantidades pendientes.
Opciones legales disponibles
En España, existen varias vías legales que un propietario puede explorar ante un impago:

- Reclamación extrajudicial: antes de acudir a los tribunales, es aconsejable enviar un burofax al inquilino con una oferta vinculante confidencial (OVC). Este paso puede resolver el problema sin necesidad de iniciar un proceso judicial, ya que demuestra de manera formal que el propietario está reclamando la deuda y le da al inquilino la oportunidad de regularizar la situación.
- Demanda de desahucio por impago de alquiler: si el impago persiste, se puede interponer una demanda de desahucio por falta de pago. Esta demanda debe ir firmada por abogado y procurador, independientemente del importe de la deuda. El procedimiento judicial es relativamente rápido, y en muchos casos, si el inquilino no presenta oposición, se puede conseguir la recuperación de la vivienda en pocas semanas.
- Reclamación de rentas impagadas: además del desahucio, se puede reclamar judicialmente las cantidades adeudadas. Es importante contar con pruebas documentales, como el contrato de arrendamiento, resguardos bancarios de pagos anteriores o cualquier comunicación escrita con el inquilino, que respalde la existencia y cuantía de la deuda.
Medidas preventivas
Para evitar futuros impagos, es recomendable incluir en el contrato de arrendamiento cláusulas específicas de seguridad, como la posibilidad de incluir al inquilino en un fichero de morosos en caso de impago. También se recomienda la contratación de un seguro de impago de alquiler, que garantiza al propietario la cobertura económica en caso de que el inquilino no cumpla con sus obligaciones. Además, realizar una correcta selección del inquilino, solicitando referencias y comprobando su solvencia económica, puede reducir significativamente el riesgo de impago.