El PSOE planea dar un 'sablazo' fiscal de 1.400 millones al contribuyente andaluz
Stop Sucesiones y fuentes políticas sospechan que María Jesús Montero está detrás de «esta maniobra»
Jesús Espadas, actual líder del Partido Socialista en Andalucía, con María Jesús Montero. | EP
La Asociación Nacional Contra el Impuesto de Sucesiones en España, Stop Sucesiones, ha desvelado a THE OBJECTIVE el plan que el PSOE ha ideado para confiscar el patrimonio familiar y multiplicar por cinco la recaudación de las herencias en Andalucía. Se trata de otro «sablazo fiscal». Así lo califica a este diario el presidente de dicha asociación, Eligio Taboada, que lanza una llamada de alerta a los ciudadanos, ya que entiende que, de cristalizarse esta medida, tarde o temprano «la paz fiscal de la que disfrutan parcialmente, en estos momentos, las familias andaluzas, pende de un hilo, como consecuencia de la reciente maniobra del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en el Parlamento de Andalucía».
Una maniobra, envuelta en una enmienda a los presupuestos autonómicos —señala Stop Sucesiones— y que podría suponer un nuevo «sablazo fiscal» de hasta 1.400 millones de euros. La propuesta socialista, detalla Taboada a este diario, no es un simple ajuste técnico. «Es un plan calculado para extraer, de forma injusta y en un momento de máximo dolor, 1.420 millones de euros adicionales de los bolsillos de los andaluces. Y el objetivo es claro: multiplicar por cinco la recaudación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, por lo que decimos que esto no es política económica, es, sencilla y llanamente, un ‘sablazo’ fiscal en toda regla».
Fuentes del Gobierno de Juan Manuel Moreno Bonilla constatan a TO este movimiento del Grupo Socialista en el Parlamento Andaluz. Al respecto, detallan que esta iniciativa liderada por Juan Espadas ha venido recientemente a través de enmiendas parciales al Presupuesto de la Junta, enmiendas que afectan a los presupuestos, de manera que suponen una subida de impuestos, razón por la que han tenido que pasar por el Consejo de Gobierno.
Una operación diseñada por Madrid
El Gobierno de Moreno Bonilla ha rechazado de pleno esta enmienda del PSOE, esencialmente por ser contraria a la sucesiva bajada de impuestos desde que los populares llegaron en 2019 a San Telmo. La propuesta hecha por el principal partido en la oposición en el Parlamento andaluz, creen, es más que evidente y tiene trazo largo, pues persigue, según las mismas fuentes, que la Junta ingrese el próximo año 1.420 millones de euros más, recuperando «todos los impuestos bonificados y, entre comillas, derogados, incluso subiéndolos». Dicho de otro modo y en clave política, «esta es una operación diseñada desde Madrid, por María Jesús Montero, enseñando la patita, porque fue ella quien dijo […], precisamente en la Conferencia de Política Fiscal y Financiera, que piensa penalizar a las comunidades del sistema de financiación del régimen general, si tienen, como ellos le llaman, dumping fiscal».
El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha llegado rechazar hasta 158 enmiendas del PSOE que contemplaban un incremento de los ingresos en el Presupuesto para 2026 de hasta 2.510 millones de euros, en su mayor parte por incrementos tributarios (1.170 millones por la derogación de las bonificaciones del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, transmisiones patrimoniales, actos jurídicos documentados, o Impuesto sobre el Patrimonio, y 250 millones por la deflactación del IRPF).
Además —indica la Junta—, también se proponía un incremento de 500 millones por la recuperación de la subasta de medicamentos y otros 90 millones por la reprogramación de fondos europeos. Asimismo, se incluían otros 500 millones en concepto de aumento de ingresos del sistema de financiación autonómica (SFA).
El Consejo de Gobierno ha acabado rechazando las 149 enmiendas de gasto planteadas por el PSOE con cargo a ese nuevo escenario de ingresos.
Una medida que recae sobre la clase media y trabajadora
Aunque las enmiendas socialistas no tendrán hueco en el nuevo presupuesto andaluz, entiende Stop Sucesiones, «la magnitud de la cifra es lo que hace esta propuesta especialmente alarmante, ya que 1.420 millones de euros es el coste que el PSOE quiere imponer a las familias andaluzas que atraviesan un duelo».
«Cuando hablamos de herencias —denuncia Taboada—, la realidad es tozuda. No estamos hablando de grandes fortunas que utilizan complejos entramados financieros. Estamos hablando del patrimonio medio que consiste en la vivienda familiar, los pocos ahorros que dejan los abuelos para que los nietos puedan estudiar o la pequeña empresa que da sustento a una familia».
«Estos 1.420 millones representan el sacrificio de toda una vida de trabajo y esfuerzo que ya ha tributado al Estado en innumerables ocasiones (IRPF, IVA, IBI, etc.). Gravar de nuevo este patrimonio en el momento de la transmisión mortis causa es una doble imposición y una medida profundamente injusta que recae, fundamentalmente, sobre las clases medias y trabajadoras». Aquí —concluye— «el término ‘confiscar’ adquiere su sentido más literal. Pues la reintroducción del impuesto de sucesiones con el nivel de recaudación que plantea el PSOE en Andalucía significa, en muchos casos, la imposibilidad material de hacer frente al pago del impuesto sin vender el bien heredado».