THE OBJECTIVE
Banca

Los bancos ganan velocidad en la venta de hipotecas con el mayor volumen en 14 años

Las entidades conceden en julio 6.660 millones, nuevo récord mensual desde diciembre de 2010

Los bancos ganan velocidad en la venta de hipotecas con el mayor volumen en 14 años

Carteles de los principales bancos. | Agencias

Los bancos toman velocidad en la venta de hipotecas, aprovechando la recuperación de la demanda, y registran el mayor volumen de financiación mensual de los últimos 14 años. Todos los indicadores están mostrando una fuerte reactivación del mercado inmobiliario y, por ende, de los créditos para la adquisición de la vivienda, al calor de la nueva era de bajadas de tipos de interés por parte del BCE tras la abrupta subida de las tasas en los últimos años. Las cifras del importe de préstamos otorgados obtenidas por THE OBJECTIVE confirman el impulso de este negocio, ya que en julio la concesión alcanzó los 6.660 millones de euros, máximo desde diciembre de 2010, cuando se estaban produciendo los estertores de la pasada burbuja del ladrillo.

Las entidades ya vieron una mejora sustancial en los primeros meses, para su sorpresa, mejora que han venido confirmando a lo largo del tiempo. A finales de 2023, esperaban la recuperación en la recta final del presente ejercicio, pero se ha adelantado, lo que les permite ser más optimistas sobre el mantenimiento de la rentabilidad futura, ya que compensan la caída de los ingresos por la bajada de los intereses con la nueva producción.

En julio, según los datos del Banco de España, la financiación de las hipotecas se disparó un 25,4% en términos interanuales y del 16,5% con respecto a junio. Una evolución que va en consonancia con los números del Colegio de Registradores, que reflejaban un aumento del 20% en la compraventa de viviendas, hasta superar las 70.100 unidades, y un crecimiento en el número de préstamos del 31%.

La demanda de hipotecas poco a poco va tomando brío ante la bajada de los tipos y de las cuotas. En los primeros meses del año, el pago mensual de las nuevas operaciones se redujo un 5%, hasta los 714 euros, un dinero que previsiblemente ha disminuido más en primavera y verano, después de que los intereses medios que están exigiendo los bancos siguen descendiendo.

El tipo que reclama el sector, incluyendo comisiones, ha ido mermando paulatinamente. En diciembre del año pasado, la tasa se encontraba en el 4% y en julio se situaba en el 3,45%. Un porcentaje que caerá más a lo largo del ejercicio y en 2025, debido a que el BCE recortará aún más el precio oficial del dinero. En junio dio el primer paso en esta dirección y se espera que en septiembre -el próximo jueves- lo vuelva a hacer. Además, el mercado está anticipando ahora más disminuciones que hace unos meses, porque la principal amenaza, los salarios, ha subido menos de lo pronosticado y permite al organismo monetario actuar con más contundencia.

Antes, los expertos vaticinaban para 2024 tres bajadas de 25 puntos básicos cada una. Ahora, incluida la del pasado junio, no se descartan cuatro o cinco, o que sean de una mayor intensidad. Con ello, los tipos oficiales retrocederían a una horquilla del 3,25%-3,5%. Por ello, el euríbor ha experimentado un hundimiento en las últimas semanas, retrocediendo hasta el entorno del 3,1%. Para 2025, por su parte, las previsiones apuntan a que podría caer hasta el 2%.

Para la banca, la recuperación del negocio de las hipotecas es clave en este entorno, porque aunque no es el que más rendimiento ofrece a corto plazo, sí permite una captación de clientes y una vinculación de estos usuarios con el paso del tiempo. Todas las entidades están centrando su estrategia en esta actividad, aunque tampoco están descuidando otros segmentos para aprovechar la oferta pública de adquisición de acciones (opa) de BBVA sobre el Sabadell con carácter hostil, con el fin de robarles pymes y autónomos, la joya de la corona del grupo catalán. También están siendo más agresivos en el mundo de los depósitos, donde están elevando los tipos de interés pese al recorte de los tipos y al descenso del euríbor.

Ninguno quiere quedarse atrás y todos están intentando impulsar sus números lo máximo posible gracias a la guerra abierta entre BBVA y el Sabadell. Está en juego un botín de aproximadamente un millón de clientes, que son los que podrían abandonar ambos en dos o tres años, siempre y cuando la fusión llegue a buen puerto y se materialice.

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D