El inversor mexicano del Sabadell pone en prenda el 17% de sus acciones del banco
David Martínez, mayor socio individual de la entidad, entrega como garantía 33 millones de títulos en plena opa de BBVA
El inversor mexicano del Sabadell, David Martínez, ha puesto en prenda en torno al 17% de las acciones que posee del banco. Y lo ha hecho en plena oferta pública de adquisición de acciones (opa) de BBVA sobre la entidad catalana, después de que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) haya postergado al menos hasta marzo el análisis de la operación para dar o no su visto bueno.
Martínez, conocido como el ‘fantasma de Wall Street’, entregó a finales de noviembre como garantías para una operación 33 millones de títulos del Sabadell, de acuerdo con los datos recabados por THE OBJECTIVE en la CNMV, que suponen el porcentaje anteriormente citado sobre el número total que tiene. Este tipo de pignoraciones, que en su caso está hecha a través de su sociedad patrimonial Fintech Europe, se suelen usar como aval para conseguir financiación para otros fines y, en caso de impago, servirían para saldar parte o toda la deuda insolvente.
El inversor mexicano es el mayor accionista individual del Sabadell, banco en el que entró en 2013. Desde entonces, ha desembolsado 375 millones de euros en distintas transacciones. En la actualidad, ostenta el 3,5% del capital, con algo más de 193 millones de títulos de la entidad, cuyo valor de mercado estaría cerca de los 350 millones. En mayo, cuando BBVA lanzó la opa, era mayor y acumulaba plusvalías latentes. Pero debido a la bajada de la cotización de este, que ha lastrado la del grupo catalán, ahora asumiría pequeñas pérdidas.
La semana pasada BBVA ya se había dejado los 12.000 millones planteados en la oferta por el Sabadell debido, principalmente, a la amenaza sobre México, su principal negocio, ante la más que probable aprobación de aranceles del nuevo presidente de EEUU, Donald Trump, a partir de enero, cuando vuelva a la Casa Blanca. En las dos últimas sesiones, no obstante, ha recuperado una mínima parte.
Martínez es una de las pocas voces discordantes en el seno del Sabadell con respecto a la opa. Fue el único consejero que no mostró su rechazo en la reunión en la que el banco se opuso a abrir negociaciones para explorar una fusión. Tras esta decisión, BBVA lanzó la oferta hostil.
Desde entonces, el accionariado del grupo catalán ha cambiado drásticamente. Tras la entrada de BNP Paribas, a principios de noviembre, tan solo 11 grandes inversores controlan casi el 30% del capital, entre los que se encuentra el empresario mexicano. Este tipo de instituciones suelen ser más proclives a aceptar una propuesta como la planteada por BBVA, una adquisición a través de canje de acciones en vez de efectivo.
Algunos expertos no descartan que la entidad vasca vaya a modificar las condiciones, incluyendo una parte importante en metálico para facilitar el éxito de la operación. Una idea que se ha afianzado en distintas casas de análisis tras el varapalo de la CNMC, con la ampliación del periodo de estudio. Por ejemplo, Deutsche Bank ha señalado en un informe que podría poner sobre la mesa 2.000 millones para atraer a los pequeños accionistas del Sabadell y poder lograr el 90% necesario para poder llevar a cabo una posterior integración.
El consejero delegado de BBVA, Onur Genç, volvió a defender este martes en un encuentro financiero en Londres la operación. El directivo subrayó la necesidad de los bancos europeos de contar con una escala adecuada para competir internacionalmente y advirtió de que corren el riesgo de quedar rezagados frente a la competencia de otras regiones. «A pesar del tamaño económico de Europa, ninguna entidad de la Unión Europea figura actualmente entre las 25 primeras del mundo por capitalización bursátil, un ranking dominado por grupos de EEUU., China, India, Canadá, Japón o Australia».
Además, a su juicio, la competencia crece desde fuera de la banca tradicional, impulsada por gigantes tecnológicos, lo que añade más presión. «En nuestro negocio, si no tienes escala, no puedes competir», explicó antes de considerar que «deberíamos estar preocupados por no tener un banco de la UE en ese ranking» para impulsar el crecimiento económico de la región. En este sentido, indicó que el primer paso debe ser la creación de campeones nacionales de mayor tamaño antes de abordar fusiones transfronterizas en el Viejo Continente. De ahí que BBVA haya propuesto la integración con el Sabadell.