El Santander pierde clientes en España pese a la opa de BBVA sobre el Sabadell
La entidad cántabra reduce en algo más de 8.000 el número de usuarios en el primer trimestre de este año

Sucursales de Caixabank, BBVA y Santander. | Efe
El Santander ha perdido clientes en España pese al entorno favorable para aumentar usuarios por la oferta pública de adquisición de acciones (opa) de BBVA sobre el Sabadell. En el primer trimestre de 2025, de acuerdo con los datos recabados por THE OBJECTIVE, el grupo cántabro ha recortado su base total en más algo más de 8.000 empresas y particulares.
La evolución del Santander contrata con la registrada por otros competidores de BBVA y el Sabadell, como Caixabank, que sí ha aprovechado de nuevo esta coyuntura para elevar el número de clientes. Las cifras indican que en su caso ha sumado 70.000 en los tres primeros meses del ejercicio.
En concreto, el Santander tenía a cierre de marzo 15,299 millones de clientes, frente a los 15,307 millones de diciembre. No obstante, en el último año el saldo sigue siendo positivo en más de 165.000, gracias a la captación neta de trimestres anteriores, en los que sí sacó tajada de la situación del mercado por la opa lanzada por BBVA en mayo de 2024.
Pese a la pérdida de usuarios totales, el Santander ha mejorado el número de aquellos que son activos, es decir, los que aportan más valor porque operan de manera frecuente con el banco y permiten elevar los ingresos por el cobro de intereses o comisiones. En el arranque de 2025, estos han subido de 8,84 millones a los 8,937 millones. Es decir, casi 100.000.
Fuentes de la entidad señalan que de manera recurrente se realiza una limpieza de la base de datos, por el fin de campañas puntuales y los clientes que han fallecido. Remarcan que lo importantes son los activos, que son los que trabajan con ellos y contribuyen a los beneficios. Pero también es destacable que el Santander tiene centrada su estrategia en la rentabilidad y que en la actualidad la alta competencia hacen menos atractivo asumir riesgos, sobre todo en hipotecas y en pymes, por lo que ha rebajado el pistón comercial.
BBVA y el Sabadell han afilado sus cuchillos con mayor intensidad para no defender su negocio ante la incertidumbre sobre el resultado final de la opa y mejorar sus cuentas, aunque en el caso del primero ha sido menos agresivo en hipotecas, uno de los segmentos que más clientes genera, porque la competencia en precios está siendo feroz, hasta el punto de que hay entidades que ofrecen estos préstamos para la compra de viviendas a pérdidas.
Desde que BBVA lanzó la opa sobre el Sabadell el conjunto del sector ha reforzado su ofensiva para poder robarles actividad y usuarios. Una operación de estas características permite al resto captar parte del negocio, que en este caso se estima que podría alcanzar el millón de clientes si finalmente la transacción se realiza. Las mayores oportunidades llegarán si el banco vasco logra fusionar el catalán.
Caixabank suma otros 70.000 clientes
Caixabank, a diferencia del Santander, ha logrado mantener el ritmo comercial y ha sumado a su cartera empresas y particulares. Entre enero y marzo ha elevado de los 18,48 millones de usuarios a los 18,55 millones, consolidando así su posición de líder del mercado nacional. Precisamente una de las claves de este aumento ha estado en las hipotecas, en las que la comercialización ha experimentado un avance del 62%.
La entidad catalana comenzó a ganar usuarios a finales de 2023, después de varios años recortando el número como consecuencia de la absorción de Bankia en 2021. Tras esta integración llegó a perder algo más de un millón de usuarios, pero desde entonces no ha parado de crecer, y en los últimos tiempos el incremento se está acelerando. En el segundo semestre del año pasado, captó un total de 150.000.
La intención de Caixabank es, según la hoja de ruta presentada en otoño, incrementar su base en 800.000 clientes en los próximos tres años. Es decir, que espera captar en cada ejercicio un número aproximado al conseguido en 2024. Un ritmo que, por ahora, mantiene y que le permite compensar los efectos negativos por la bajada de los tipos de interés por parte del BCE. La entidad desvincula la ganancia que está teniendo de la opa y asegura que «el entorno no ha favorecido particularmente la captación».
La pérdida de usuarios por el Santander coincide con un momento de cambios organizativos, tras la incorporación como consejero delegado del que fuera máximo responsable de ING en España, Ignacio Juliá, que sustituyó a finales del ejercicio pasado a Ángel Rivera. Además, el grupo cántabro ha llevado otras reestructuraciones de altos cargos en otros segmentos, tanto en la red comercial como en su división de gestión de activos de inversión.
Aunque en España no ha tenido un buen desempeño en este campo, en el conjunto global el Santander ha logrado registrar un aumento de los clientes de 2,23 millones. El objetivo que se ha marcado el banco es llegar a tener 200 millones de usuarios en todo el mundo a finales de este año. En la actualidad, tiene 174,8 millones, por lo que parece complicado que pueda llegar a esa cifra a finales de diciembre.