BBVA recorta 1.500 empleados en México antes de la opa y en plena guerra arancelaria
El grupo vasco rebaja un 3,2% la plantilla en su mayor mercado a la espera de la resolución de la oferta sobre el Sabadell

Sede de BBVA en México. | BBVA
BBVA ha realizado un recorte de plantilla en su principal mercado, México, antes de que pueda comenzar la oferta pública de adquisición de acciones (opa) lanzada sobre el Sabadell y en plena guerra de aranceles puesta en marcha por la administración estadounidense de Donald Trump.
El grupo vasco ha llevado a cabo una disminución de algo más de 1.500 empleados en México en el primer trimestre del ejercicio presente, en un movimiento poco habitual, ya que desde hace tiempo viene aumentando la fuerza laboral. En concreto, según los datos recabados por THE OBJECTIVE, BBVA ha rebajado el número de trabajadores en su filial mexicana en 1.564 personas. Con ello, el total de trabajadores se situó en los 47.329. Es decir, que ha ajustado la plantilla en un 3,2%.
El banco, aunque considera que México no sufrirá tanto como otras regiones la guerra comercial abierta por EEUU por los aranceles, trata de compensar las consecuencias negativas con un recorte de gastos y avanza asimismo en la digitalización de los procesos bancarios ante el auge de las nuevas tecnologías y los usos de los ciudadanos.
México es clave para BBVA desde hace más de un decenio, ya que aporta algo más de un 50% de los beneficios del grupo. En gran medida, de su evolución y desempeño depende todo el conglomerado presidido por Carlos Torres. De ahí que en mayo de 2024 lanzara la opa por el Sabadell. El objetivo principal no es otro que intentar equilibrar el balance hacia mercados maduros, como España, y limitar su exposición a los emergentes.
Si finalmente el grupo vasco logra tomar el control del catalán, la entidad llevará a cabo un expediente de regulación de empleo (ERE) en nuestro país para lograr ahorros de gastos. La politización de la opa está suponiendo un retraso en el desenlace de la operación y añadiendo dudas sobre el resultado de la misma. El Gobierno ha iniciado una inédita y chapucera consulta pública para decidir qué condiciones impone a la transacción al margen de los requerimientos de la Comisión Nacional de los Mercados de la Competencia (CNMC) como consecuencia de las presiones ejercidas por algunos de sus socios parlamentarios, principalmente los independentistas catalanes y Sumar, para que vete la oferta, a pesar de que lo impide la legislación.
Las estimaciones iniciales apuntaban a que si BBVA lograba fusionar el Sabadell tras la opa, algo que ahora está muy en el aire, tendría que aplicar un ERE en España para unos 5.000 trabajadores. En el mundo financiero ahora se considera que el recorte de plantilla será muy inferior; primero, porque el escenario más probable es que la entidad renuncie o sea obligada a no llevar a cabo una integración, y segundo, porque unas de las preocupaciones del Ejecutivo sobre la operación tiene que ver con la repercusión en el empleo, con lo que el grupo vasco podría tener que comprometerse a bajar sustancialmente la dimensión del ajuste para que el Gobierno no ponga trabas excesivas.
De acuerdo con lo que explicó hace unos meses el presidente del BBVA a los sindicatos, la intención que tenía sobre el ERE era materializar un ajuste sin prejubilaciones a ejecutar en un plazo de 18 meses. Es decir, que todas las salidas serían despidos, en principio voluntarios.
BBVA lanzó en 2021 su último ERE que, tras el acuerdo con los sindicatos, implicó 2.725 salidas a través de despidos y prejubilaciones para los trabajadores mayores de 55 años. Además, el ajuste incluyó 210 excedencias voluntarias. El pacto supuso 1.000 bajas menos de las planteadas inicialmente por la entidad, que por entonces perseguía rebajar los costes por las consecuencias de la pandemia.
En España, a diferencia de México, la entidad sigue aumentando su plantilla, aunque en algunos departamentos, como la red de agentes financieros, ha llevado a cabo recortes. Los datos reflejan que en nuestro país en los primeros tres meses de 2025 ha ampliado en unos 200 el número de trabajadores, hasta superar los 29.000. A cierre de marzo, la cifra se situó en 29.085 personas. El crecimiento se produce porque BBVA está incorporando fuerza laboral, principalmente centrada en los servicios de datos, inteligencia artificial e ingeniería tecnológica, para potenciar la banca digital.