Los hijos desgravan en la Renta 2022: cómo aplicar la deducción por descendientes
También es conveniente revisar las deducciones que tiene cada comunidad autónoma para los contribuyentes con descendientes a cargo.
Los padres y madres primerizos se llevarán una alegría al saber que sus hijos desgravan en la Renta 2022. Al presentar la declaración, se pueden aplicar numerosas desgravaciones dependiendo de la situación de cada persona. Una de ellas es la deducción por descendientes, que varía dependiendo de la edad de los hijos y de la cantidad de descendientes que se haya tenido. En THE OBJECTIVE te detallamos las deducciones que puedes aplicar en tu declaración del IRPF si tienes hijos.
Como en casi todas las deducciones, en este caso también se recomienda prestar especial atención a las que se ofrecen en cada comunidad autónoma. Muchas veces se pasan por alto en la declaración, a pesar de que habitualmente se ofrecen ventajas fiscales relacionadas con los hijos y su crianza.
Asimismo, es conveniente tener en cuenta que las rentas en especie no están obligadas a tributar. Es el caso de los beneficios que entregan algunas empresas a sus trabajadores, como los cheques guardería para ayudar a sufragar estos gastos o los seguros de salud de los hijos.
Lo primero es tener claro qué se entiende por descendiente. Según explica la Agencia Tributaria, son los hijos, nietos o bisnietos que descienden del contribuyente y que están unidos a este por vínculo de parentesco en línea recta por consanguinidad o por adopción. No se incluyen ni a sobrinos ni a hijastros y sí se consideran descendientes las personas vinculadas por razón de tutela o acogimiento y si existe una resolución judicial sobre su guarda y custodia.
Requisitos para la deducción por descendientes
En la web de la Agencia Tributaria señalan una serie de requisitos que deben cumplir los contribuyentes para aplicar la deducción por hijos o por descendientes.
Por una parte, el descendiente debe residir con el contribuyente y depender económicamente de él. Esto aplica tanto si se trata de un menor de 18 años o de 25 años, teniendo como referencia la edad que haya cumplido a 31 de diciembre de 2022.
Existe una excepción a este requisito de edad. Hacienda también permite aplicar la deducción en los casos en los que el hijo o descendiente sea mayor de 25 años y tenga un grado de discapacidad del 33% o superior.
Además, si el hijo o descendiente reside fuera del domicilio, se admite esta posibilidad siempre que esta circunstancia se produzca porque está cursando estudios fuera de su lugar de residencia.
Otro requisito relevante es que el descendiente menor de 25 años no haya recibido rentas por encima de los 8.000 euros anuales, excluidas las rentas exentas del impuesto. Tampoco debe haber realizado de manera individual la declaración de la renta por encima de los 1.800 euros.
Las desgravaciones por descendiente
Mientras más pequeño sea el hijo, mayor será la deducción en la declaración de la Renta 2022. De hecho, si el descendiente tiene menos de tres años, el mínimo a deducir llega a los 2.800 euros anuales.
Además, si son varios los contribuyentes con derecho a la aplicación del mínimo familiar por un mismo descendiente, por ejemplo, igual grado de parentesco, la cuantía se prorratea entre ellos por partes iguales.
En términos generales, los mínimos de la deducción por descendientes son de 2.400 euros anuales por el primero; 2.700 euros anuales por el segundo; 4.000 euros anuales por el tercero. Y 4.500 euros anuales por el cuarto y siguientes.
En el caso de las familias numerosas, se aplica un importe máximo de deducción al mes, de 100 euros, y anual, de 1.200 euros para las que tengan tres o cuatro hijos. Si se trata de familias numerosas de categoría especial (desde cinco hijos), las deducciones se incrementan en un 100%.
Cada uno de los hijos que formen parte de la familia numerosa, por encima de los límites establecidos para adquirir su categoría (tres hijos en la general y cinco hijos en la especial), tendrán un aumento en la desgravación de 600 euros anuales. Esta desgravación se puede solicitar si no se ha requerido el abono anticipado (Modelo 143).
Separación y guarda y custodia de los hijos
Como hemos dicho, uno de los requisitos para aplicar estas deducciones es que los descendientes convivan con el contribuyente. Pero en el caso de separación matrimonial legal, puede ser que la guarda y custodia sea compartida. En este escenario, el mínimo familiar por descendientes se prorrateará entre ambos padres, con independencia de aquel con quien estén conviviendo a la fecha de devengo del IRPF.
Si no hay custodia compartida, el mínimo familiar por descendientes corresponderá a quien tenga atribuida la guarda y custodia de los hijos en la fecha de devengo del impuesto (normalmente, el 31 de diciembre), por ser esta la persona con la que los descendientes conviven. Esto, según lo dispuesto en el convenio regulador aprobado judicialmente.
La Agencia Tributaria recuerda que la ausencia esporádica del hijo de la vivienda habitual como consecuencia de los períodos lectivos del curso escolar no rompe el requisito de convivencia que se exige, siempre que cumpla con el resto de los requisitos. En estos casos, los contribuyentes deben tener en cuenta que se asimila a la convivencia la dependencia económica, con una salvedad: que se satisfagan anualidades por alimentos a favor de dichos hijos que sean tenidas en cuenta para el cálculo de la cuota íntegra.