España lleva diez años sin revisar el plan energético que evita los apagones
La Estrategia de Seguridad Energética del año 2015 se llevó a cabo en el gobierno de Mariano Rajoy

Teresa Ribera y Sara Aagesen. | A. Pérez Meca (Europa Press)
El Gobierno lleva una década sin actualizar la Estrategia de Seguridad Energética del año 2015. Un plan que se llevó a cabo durante el mandato del popular Mariano Rajoy y que era esencial para mantener la seguridad energética del país. El plan nació de la estrategia de seguridad nacional que el Gobierno de Rajoy aprobó en 2013 con el objetivo de preparar al Estado en materia energética para dirigir su actuación en caso de situaciones complejas.
La Estrategia de Seguridad Energética consta de 29 folios y es un documento esencial para «desarrollar las previsiones establecidas de la estrategia de seguridad nacional con respecto al ámbito de la seguridad energética, con el objeto de orientar la acción del Estado con visión anticipatoria, sobre la base de la singularidad energética de nuestro país». Fuentes del Ministerio de Transición Ecológica no han querido comentar con este periódico dicho asunto.

Los años fueron pasando y el plan no se ha actualizado. Un escenario que provocó que el Partido Popular presionara en el Congreso en el año 2024. «Se han producido acontecimientos globales especialmente relevantes como la pandemia de covid en 2020, la crisis en las cadenas de suministro en 2021, la emergencia energética durante 2021 y 2022 y la invasión rusa de Ucrania, con las correspondientes sanciones y medidas adoptadas en el seno de la UE con especial incidencia en el sector energético».
En 2020, durante el gobierno de Pedro Sánchez, y a través de una orden del Consejo de Seguridad Nacional, compuesto por diversos ministerios y que incluye también a Moncloa, se aprobó la revisión de la estrategia del año 2015. Un año después, en 2021, el informe anual de Seguridad Nacional señaló que el comité especializado de seguridad energética había comenzado a revisar la estrategia de 2015. Al año siguiente, en el informe del año 2022 sobre la Seguridad Nacional, se sustituyó el capítulo de «seguridad energética», que había aparecido en los últimos informes, por el de «vulnerabilidad energética».
La Estrategia de Seguridad Energética de 2015 se articula en torno a cinco capítulos considerados como «ejes estratégicos». El primero tenía por nombre «España en el entorno energético global». El segundo definía el concepto de seguridad energética nacional. En tercer lugar, se relataban los desafíos de la seguridad energética nacional, articulados en torno al crecimiento de la demanda, la ecuación y la volatilidad de los mercados energéticos, entre otros. En cuarto lugar, la gobernanza de la seguridad energética dentro de la seguridad nacional. Y en quinto y último lugar, las líneas de acción en seguridad energética (diversificación del mix energético, seguridad de abastecimiento…).
Las posibles causas que se esbozan sobre el apagón que tuvo lugar el pasado lunes están vinculadas a muchas de estas líneas de actuación, pero que hoy se encuentran desfasadas con el escenario actual.
Uno de los detalles interesantes de la estrategia de Rajoy es que se subraya la importancia de la nuclear, como energía «autóctona». «España cuenta con un mix de generación de electricidad diversificado que combina múltiples tecnologías. Se compensa así de forma adecuada nuestra dependencia de petróleo y gas natural con el empleo de fuentes autóctonas, en las que además del carbón y la energía nuclear, destaca la capacidad de producción con energías renovables como la eólica, solar fotovoltaica, termoeléctrica, hidráulica y biomasa».
Fuentes del sector energético apuntan a THE OBJECTIVE que la responsable de esta situación es Red Eléctrica. Los expertos a los que ha tenido acceso este medio apuntan como la teoría más viable una sobrepotenciación en la red. Es decir, hubo más oferta que demanda y provocó que las generadoras (hidroeléctrica, carbón, nuclear…) se desacoplaran de la red de transporte. «El trabajo de Red Eléctrica era haber evitado esta tensión», sentencian. Durante las horas de la mañana previas al apagón, el gestor primó las energías verdes frente a otras más contaminantes.
El discurso de Pedro Sánchez el pasado martes ha cambiado drásticamente. Por la mañana cargó duramente contras las eléctricas, responsabilizándolas del apagón eléctrico. Ocurrió durante su tercera comparecencia pública y cuando todavía no había explicado las causas del fallo eléctrico que dejó a toda la península ibérica incomunicada. Tras la reunión que tuvo por la tarde con los representantes de las eléctricas, moderó su mensaje, les agradeció su labor y pidió trabajar conjuntamente con todas ellas. Las eléctricas siguen poniendo el foco en el papel de Red Eléctrica y han mantenido un discurso sin contradicciones.