Marruecos bate por cuarto año consecutivo el récord de comercio exterior con España
Los problemas para abrir las aduanas de Ceuta y Melilla apenas tienen impacto en las relaciones comerciales con Rabat

El rey de Marruecos, Mohamed VI, en una reciente aparición pública | Agencias
Marruecos superará por cuarto año consecutivo su récord de comercio exterior con España, la mejor muestra de que las relaciones entre los dos gobiernos pasan por un gran momento. Las cifras de la secretaría de Estado de Comercio analizadas por THE OBJECTIVE indican que, durante los diez primeros meses de 2024, las exportaciones de Madrid a Rabat llegaron a los 10.843 millones de euros y las importaciones a los 8.220 millones, lo que supone el dato más alto para este periodo y un crecimiento interanual del 6,8% para los envíos y del 9,1% para las compras.
Estas cifras superan ampliamente el desempeño global del comercio exterior de España para este mismo periodo. Entre enero y octubre de 2024 las exportaciones crecieron apenas un 0,7% y las importaciones se redujeron un 0,4%. De hecho, las previsiones de los analistas advierten de que el desplome de economías como Francia y Alemania podría llevarnos a cerrar con cifras negativas en cuanto a los envíos. Algo que no afectará a las relaciones económicas con Marruecos.
Y es que las exportaciones e importaciones -a falta de los datos de los dos últimos meses de 2024- ya superan los registros anuales hasta el año 2021. Y si se mantiene la evolución recogida hasta la fecha, se superará ampliamente el último récord alcanzado en 2023, con 12.145 y 9.032 millones, respectivamente. En marzo de 2022, el Gobierno español rompió su histórica neutralidad en el conflicto del Sáhara Occidental aceptando la solución propuesta por Rabat, lo que generó una “nueva etapa” entre las relaciones bilaterales con Madrid, pero desencadenó el veto comercial de Argelia que se mantuvo por casi dos años.
Ceuta y Melilla
Los datos confirman un buen momento pese a los problemas que se han producido estos días en las fronteras de Ceuta y Melilla. La aduana comercial con Melilla sigue sin funcionar, ya que Marruecos mantiene el bloqueo de productos provenientes de España por vía terrestre, pese a que los compromisos firmados establecieron que se liberara el paso a comienzos de este año. Marruecos cerró la aduana en 2018 de manera unilateral y en abril de 2022 se firmó un acuerdo con España para regularizar la situación, tras el giro en el Sáhara liderado por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.
Rabat se comprometió a la reapertura de la aduana en Melilla y a inaugurar un nuevo punto comercial en Ceuta. Hace un año se realizaron pruebas piloto, pero las autoridades marroquíes argumentaron problemas técnicos para normalizar la situación en estos últimos meses. Ahora, el Gobierno español indica que se siguen cerrando flecos administrativos para un óptimo cumplimiento. En cualquier caso, en el último año de funcionamiento de este paso terrestre el comercio fue cercano a los 90 millones de euros, una cifra residual si se compara con los 12.146 millones de exportaciones registradas por España al país africano en todo el año 2023.
El caso es que casi tres años después del giro en el Sáhara las relaciones comerciales entre España y Marruecos están en su punto álgido, ya que el peso de las compras y ventas a Rabat ha crecido de manera exponencial. En 2022, el porcentaje de las exportaciones de España al país africano sobre el total fue del 3%, para pasar al 3,2% en 2023 y al 3,4% en 2024. En el caso de las importaciones se ha pasado desde el 1,9% de 2022, al 2,1% de 2023 y al 2,3% de la tarta en los primeros diez meses del año 2024.
Productos de Marruecos
Esto significa que, con los últimos datos disponibles, Marruecos es el segundo destino de las exportaciones de España fuera de la Unión Europea tras Estados Unidos -superando incluso a China- y es el tercer proveedor de fuera del bloque comunitario, tras Estados Unidos y China y por encima de socios históricos de nuestra economía como Brasil o Turquía.
Una evolución que ha ido de la mano de un cambio en el mix de productos que llegan desde Marruecos. En 2023 y 2024 fueron las frutas y verduras las que concentraron el grueso de las compras, principalmente por los elevados precios en España, impulsados por la sequía que afectó al país y el aumento en el coste de la energía. Históricamente, hemos comprado a Rabat aparatos y material eléctricos, pescados, crustáceos y moluscos, automóviles y prendas de vestir de punto, pero la nueva realidad cambió esta tendencia hacia las hortalizas.
En octubre de 2024, las principales importaciones de España desde Marruecos incluyeron productos como cable aislado (166 millones de euros), moluscos (85,8 millones), vehículos de motor; piezas y accesorios (45,1 millones), trajes de mujer no tejidos (38,1 millones), y otras frutas (44,1 millones). Este mismo mes, las principales exportaciones hacia Rabat fueron petróleo refinado (95,8 millones), motores (85,8 millones), vehículos de motor, piezas y accesorios vinculados (67,4 millones), aceite de soja (47,3 millones) y tapas de plástico (27,8 millones).